El Prat, el único aeropuerto del mundo infragestionado a propósito y de manera desleal.

Lo de El Prat es un caso prácticamente único en el mundo, no solo porque la administración que padece el aeropuerto es centralizada, sino porque, además, es infragestionada con perfidia.

El funcionamiento actual de AENA impide que El Prat, y el resto de infraestructuras aeroportuarias españolas, tengan autonomía de gestión y compitan entre sí, como pasa en los países que disponen de grandes aeropuertos internacionales. De hecho, en Europa solo los estados nórdicos (Noruego y Finlandia con dos únicos aeropuertos importantes) y Rumanía mantienen un sistema centralizado; y China e Indonesia, en Asia, tienen un procedimiento equivalente al español.
Recordar que Portugal privatizó sus aeropuertos por 3.000 millones (concesión de 50 años a la francesa Vinci). Una cantidad parecida a la que ingresó el estado español por privatizar la mitad de AENA y que hizo más ricos a los de siempre...

La cuestión es que El Prat no puede autogestionarse buscando un beneficio regional, incluso no puede competir con Barajas; recuerden las palabras de la exministra del PP Ana Pastor cuando dijo: "no se puede pensar en cómo puede competir el aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas con el de Alicante y éste con el de El Prat. Los aeropuertos españoles tienen que ser competitivos para que vengan más turistas y para tener mejor movilidad, y eso se hace con aeropuertos en red". Y fin de la película.

Pero la ministra escondió que el sistema debe beneficiar a Madrid y luego lo que sobre para los demás. Sobre todo crear la dependencia de conexiones con la capital de España.
Algo que tuvo su momento álgido cuando Iberia decidió retirase del aeropuerto barcelones. Una estrategia política de primera -tal cual- No olvidemos que lo hizo cuando Caja Madrid tenía el control accionarial de Iberia y Esperanza Aguirre presidía la comunidad de Madrid. En esa época, la presidenta sabía de lo importante que era para el PIB de Madrid su aeropuerto; con esa decisión obligaba a que todo el mundo pasara por Madrid en sus viajes intercontinentales, sobre todo hacia América Latina.

Es imposible imaginar que habría ocurrido si una aerolínea de bandera en manos de accionistas catalanes hubiera abandonado el aeropuerto de Madrid. Pues simplemente no lo hubieran permitido, el gobierno español la habría expropiado por el interés general. Pero Barcelona se quedó, prácticamente de un día para otro, sin vuelos intercontinentales directos a Sudamérica...
Esa decisión del 2009 hizo perder un 9,4% de pasajeros a El Prat y mantener el tipo al de Madrid.
Un aeropuerto el de Madrid, que, a pesar de su faraónica infraestructura, iba en decadencia. Tocando fondo en el 2013.

Pasajeros Barajas.

Mientras tanto el de Barcelona iba subiendo...

Pasajeros El Prat.

En Madrid se asustaron mucho cuando en el 2014 el aeropuerto de Barcelona solo estaba a 4 millones de pasajeros del de Madrid.
Y es cuando decidieron crear el Plan 100.

100 medidas que nunca vimos escritas pero que algunas no eran específicas para el aeropuerto madrileño, sino para infragestionar el de Barcelona. Por ejemplo el crear Level (de Iberia) para clonar los vuelos que hacía AirNorwegian en El Prat (para que no fueran competitivos y abandonaran el aeropuerto catalán para luego ellos hacer lo mismo). O impedir la fusión de Spanair con Qatar Airways...
O lo más bestia de todo, en el reparto de la nueva Terminal 1 perjudicaron a Air Europa y a Skyteam que eran las que tenían más vuelos intercontinentales...

Sí, tal como reza el título del post, AENA se encarga de beneficiar a Madrid y a perjudicar a Catalunya. La rentabilidad del aeropuerto catalán es tan fabulosa (700 millones al año de beneficio) que pueden permitirse el ponerle trabas. Es más, es posible que su crecimiento ya no aportaría más beneficios a AENA, pero sí al PIB de Catalunya. Y de eso se trata...

No nos olvidemos tampoco que cuando se gastaron 7.000 millones de euros en la ampliación de Barajas (inaugurado en el 2006) lo hicieron antes que la Terminal 1 de El Prat (2009). Desde Madrid querían esa ventaja aplastante traducida en una diferencia de 15 millones de pasajeros. Algo que creían que sería insalvable...

La cuestión es que Barcelona, su área metropolitana, incluso Catalunya, no puede decidir en la gestión de su aeropuerto. Es más, no pueden ni sancionarlo por gestión desleal.

Estamos hablando de que los catalanes no podemos disfrutar de lo primordial de cualquier ciudad o región del mundo: tener un aeropuerto que compita y al 100% de su capacidad. Y sobre todo que vaya a nuestro favor. Pagamos impuestos para que las infraestructuras regionales nos beneficien, no para que beneficien a Madrid.
Es más, el sistema radial es negativo porque merma la capacidad de reacción rápida para acometer nuevas infraestructuras porque estas deben hacerse en varios aeropuertos a la vez. En cambio, en gestión individualizada, es más rápido. Hay que recordar que El Prat tiene pendiente la Terminal Satélite cuyas obras anunció Zapatero en el 2008...

Lo bueno es que empresas españolas pueden gestionar libremente aeropuertos de todo el mundo, tal como hace Ferrovial en 4 aeropuertos del Reino Unido (uno de los cuales es Heathrow) o ¡la propia AENA! con el de Luton...

Pero no al revés.

En fin, la infragestión premedita del aeropuerto de El Prat es otro expolio que sufre Catalunya. No solo son los beneficios que van a parar a Madrid, sino el perjuicio económico que representa el no tener vuelos intercontinentales a la hora de que empresas extranjeras se instalen en Catalunya.

Lo cierto es que hay muchas maneras de presionar una infraestructura que se encuentra en una región. Y el Govern de Catalunya jamás se ha atrevido. Ahora, después del coronavirus, sería el momento perfecto para entorpecer el funcionamiento de El Prat desde la Generalitat. Del aeropuerto catalán dependen 34 (de los 48) aeropuertos españoles.

Y también se agradecería una propuesta seria y competitiva para Alguaire y el aeródromo de Igualada. Y, si me permiten, hasta tener en cuenta la inocentada que escribí el 28 de diciembre de hace casi tres años:
Heathrow, Ferrovial y la Generalitat de Catalunya estudian construir un aeropuerto con pista ganada al mar en el FÓRUM.

Los vascos siempre sacan grandes beneficios de sus apoyos, el último fue que les descontaran 600 millones del cupo. Los catalanes nunca han pedido a cambio de sus votos la gestión de sus aeropuertos (ya no hablamos de quedarse los beneficios).
Además, aunque parezca cachondeo, ahora hay 4 catalanes en el Consejo de Administración de AENA (el ex-PSC Lucena como presidente, el "freixenet" Bonet Ferrer, el ex-Unió Duran i Lleida y el exalcalde de Barcelona del PSC Hereu).
Si no es ahora...

En fin, es incomprensible que los vuelos que conectan Barcelona con el mundo se decidan desde Madrid, por unos tipos ultranacionalistas españoles que miran primero el beneficio de su ciudad y comunidad autónoma.
Pero, repito, la Generalitat de Catalunya tiene parte de culpa y, si se debe movilizar a la población, se hace. Ese aeropuerto lo hemos pagado los catalanes con nuestros impuestos, por lo tanto, debe repercutir en nuestro territorio, no en Madrid.