El puerco Luis del Val insulta a Iniesta en la cadena del odio y del vicio.

La COPE debería ser una cadena en que dieran misa y pidieran continuamente perdón por haber violado a cientos de miles de niños. Cualquier otra organización que llevara tanta pedofilia en su sino estaría prohibida y perseguida...

Pero la Iglesia española tiene una cadena para sembrar el odio e insultar a Catalunya y a los que se atreven a defender la libertad de expresión. Por sus programa estrella han pasado los mayores hijos de puta que ha parido la España más guerracivilista y reaccionaria. 

Losantos, Carlos Herrera, el que se ahogó con sus propios vómitos... han llenado su programación de catalanofobia.

Realmente antes que marcar la casilla de la iglesia mejor sería gastárselo en travestis.

Pero esa bazofia de emisora tiene la impunidad de la iglesia católica abyecta. Los tertulianos injurian al mismo tiempo que ríen y se revuelcan en sus tertulias piara. Estoy convencido que cuando alguien va al baño, entre todos se comen el truño mientras concursan a ver quién la dice más gorda en contra de Catalunya.

Pero un país puede estar lleno de hijos de perra pero al menos ser agradecido. Pues ni eso ocurre con España, posiblemente el estado inventado más miserable del planeta tierra. Iniesta ya no es el que consiguió la copa del mundo para la roja celebrándolo con una camiseta que recordaba a un amigo del RCD Español... Ahora Iniesta es un mal español vendido a los catalaufos...

Es la España en la que sembrar crispación es un oficio bien remunerado.
A esta gentuza hay que meterle una independencia en todos los morros.
Entonces veremos si pueden cobrar 6 millones en un emisora de un país quebrado. Aunque el bastardo del Herrera le importa poco, él ya tiene casa en Miami para largarse corriendo después del último contrato. Todos estos franquistas huirán de España cuando ya no puedan robar más al pobre y analfabeto feligrés...

Dios los cría y ellos se juntan...

En fin, entiendo que les jode que Iniesta hiciera un partidazo que les impidiera abrir sus botellas de cava español...
Mala suerte, a mamarla, corrompidos...
Así es la copla del repugnante maño del Val:

Perdone, señor Iniesta,
pero no es una opinión
pitarle al himno de España.
Tiene usted una confusión.

Y tampoco es medicina
que te pisen un cojón
porque eso hace mucho daño
y produce un gran dolor.

Y tampoco es futbolista
dar patadas a un balón
si no se hace como usted,
con astucia y emoción,
con destreza, con oficio
y elegancia de señor.

Pero ese gran señorío
se vuelve muy remolón
cuando se ofende a Albacete,
provincia donde nació,
que está orgullosa de ser
parte de esta gran nación
y donde no les agradan
que las muestras de aversión
se hagan a base de insultos
en casa del anfitrión.

Comprendo, señor Iniesta,
que circunstancias como esta
le ocasionen compromiso,
pero la vida está llena
de circunstancias adversas
donde los hombres, su hombría
con el valor manifiestan,
aunque conlleve algún riesgo,
porque es que el que no se arriesga
puede pasar por cobarde
y estar bajo la sospecha
de ser blandengue, gallina,
calzonazos y cagueta,
cosa que nunca he creído
por asomo que usted fuera.

Pero está tan confundido,
tan errado, que se aprecia
que usted confunde opinión
con el ultraje y la ofensa
y eso resulta un peligro
para su propia existencia,
porque a lo mejor le llaman
sumiso de pandereta,
y cree que eso es libertad
y es posible que no advierta
que le llaman apocado,
cobarde por conveniencia,
es decir que es un insulto.

El mismo que al Rey se hace
y a todo que representa
esos patanes groseros
que gritan como culecas.

Si alguien se caga en su padre
debe usted tener en cuenta
que eso no es una opinión,
sino una injuria grosera
que no debe permitir.

Recuérdelo siempre, Iniesta.
Y en la próxima ocasión,
de manera desenvuelta,
dé muestras de que ya sabe
cuál es la gran gran diferencia
entre insulto y opinión.

Y así no habrá ocasión
de los que por error piensan
que Iniesta está de rodillas
ante solo una bandera.

Pues eso, hay que hacer un último esfuerzo y largarse de ese país de malparits.