El problema del terrorismo islamista es que difícilmente tiene solución policial.

ƒƒArtículo de nuestro amigo J. Alfonso que es posible que haga saltar controversias. Se pueden rebatir en los comentarios o pidiendo que les publique un artículo desde otro punto de vista.

La cuestión es que hay que plantearse qué Catalunya independiente queremos... Y es evidente que no todos pensamos lo mismo sobre el tema de inmigración y de la religión.

El número de musulmanes es mucho mayor porque sus hijos han nacido ya en Catalunya y, por lo tanto, son catalanes.
Hay cálculos de que la población musulmana en Catalunya se sitúa ya en el medio millón.

El problema del terrorismo islamista es que difícilmente tiene solución policial.
(by J.Alfonso)


El problema de fondo es: ¿cómo hemos tolerado la creación de guetos islámicos en el corazón de europa? El otro día el Telenotícies de TV3 envió a una periodista al barrio de mayoría musulmana de Molenbeek, a Bruselas, y la crónica acababa diciendo -en el discurso recurrente y buenista habitual- que “los habituales de ese barrio se sienten discriminados y estigmatizados”. En las imágenes se veía como un marrajo le lanzaba un gargajo a un cámara y otro le hacia un gesto de decapitarlo. Enternecedor. Porque, además, no solo en Bruselas, son también los califatos de París, en Londonistán, en barrios de Hamburgo, Rotterdam, Marsella, Copenhagen, Lyon o en Barcelona. Incluso en localidades de Suecia donde los musulmanes superan ya por bastante, a los suecos.



¿Cuántos Molenbeek hay en Catalunya? Hace gracia que los periodistas de Tv3 viajen a Indomeni o Lesbos, pero nunca hayan puesto los pies en Ca n'Anglada de Terrasa, a Fondo de Santa Coloma de Gramanet, a Llefià de Badalona, a Salt, a Riudoms o en Figueres para percibir de primera mano el problema. Eso sí, después comprarán un reportaje en el extranjero con los tópicos buenistas de siempre para el 30 Minuts. Por ejemplo, en casa nuestra hay 80 mezquitas salafistas (El islamismo más radical), reconocido por los propios Mossos d'Esquadra. Ahora es peor cerrarlas que controlarlas, porque saldríamos en Al Jazeera y meterían un zambombazo en la Sagrada Família sin pestañear. ¿Pero cómo hemos podido llegar hasta aquí?



Mientras tanto nuestras autoridades se limitan a hacer cinco minutos de silencio en la Plaça Sant Jaume cada vez que hay una acción terrorista islámica y a decir, como el Mas después de los atentados contra Charlie Hebdo, que simplemente es “una lucha del Bien contra el Mal”. El ex-President no se atrevió ni a hablar de terrorismo islámico. Como si fuera la película de Batman vs Superman. Aquí, ya me perdonarán, no sé quién es el bueno y quién el malo. También recuerdo el entonces conseller Homs, su sucesora Neus Munté o el mismo titular de Interior, Jordi Jané, pidiendo “no estigmatizar” el salafismo. Una manera como cualquier otra de esquivar el problema. Por descontado, un salafista no te dirá que es un fundamentalista, sino simplemente un buen musulmán. Tampoco es necesariamente un terrorista, pero muchos salafistas acaban pegando tiros, decapitando "infieles" o quemando vivos a homosexuales en países islámicos.




¿Cómo hemos podido dejar también la política de inmigración de este país en manos de un tándem tan insensato como el de Àngel Colom y Oriol Amorós cuando, en realidad, lo que necesitábamos eran decisiones valientes? Cuando el cristianismo deviene peligroso, el establishment ya envía a sus jueces y a su policía para actuar en contra (como el caso del autocar de Hazte Oír, con el cual no comulgo para nada, pero tampoco lo censuro por aquello de la libertad de expresión y tal), y cuando el islamismo deviene peligroso (que es casi siempre), los que lo justifican o "comprenden" desde nuestras izquierdas europeas, le ponen una alfombra roja con tal de que haga propaganda y exhibición impune de sus postulados antifeministas y anti-LGTB.



La reacción eufórica de las izquierdas europeas en la victoria del derechista neoliberal Rutte en Holanda es un síntoma de lo que nos espera: La izquierda "multiculti" y la derecha clásica acabaran juntándose eventualmente porque defienden los mismos objetivos. Ya lo hicieron sin ningún tipo de máscara en Austria. En EUA los conservadores del stablishment abandonó a Trump y se negaba a darle soporte o directamente iban con la candidata mundialista de la Clinton. Con el Brexit más o menos lo mismo. En Francia será divertido ver a los comunistas dando soporte al candidato de los banqueros llamado Macron -perrito faldero de Rothschild- o a un liberal/conservador corrupto de la vieja escuela como Fillon.

El Islam es una religión que se pasa por la ingle los derechos de la mujer y de la comunidad LGTB. O sea, que cada uno decida: o estar con los Derechos humanos o con esa doctrina medieval.



Por cierto, en Alemania crearon una web donde recopilan cronológicamente y geográficamente las noticias de algunos incidentes acaecidos por este fenómeno en ese país: 
Einzelfall-Map (casos aislados, en alemán). 

Se puede pinchar y ver los enlaces de cada caso, aunque los enlaces son en alemán obviamente. Además en youtube tienen miles de horas de contenido que lamentablemente no verán en la televisión convencional, y eso que en youtube solo se permite lo más light, el contenido "inadecuado" (ellos deciden lo que es inadecuado dependiendo como sople el viento) es censurado y cancelada la cuenta de quien lo comparta. Para saber realmente lo que está sucediendo hay que ir personalmente a esos lugares y a páginas como LiveLeak o grupos concretos y específicos de personas como usted y como yo, que de forma altruista y voluntaria, recopilan pequeñas muestras de lo que el sistema no quiere que veamos.

Yo mismo perdí mi propia cuenta del youtube por subir este caso aislado en primicia. El viento me sopló de cara.




Hace 10 años el sistema nos decía "España necesita 100.000 inmigrantes" ahora el sistema nos dice "España necesita 10.000.000 de inmigrantes" y les aseguro que esos 10 millones son menos de los que actualmente ya hay y que muchos ni están censados, y otros muchos de los que si lo están, andan recibiendo ayudas de todo tipo.

Así que vayámonos acostumbrando a las travesuras de la guerra santa y sus aliados, nuestros dirigentes.