Una empresa catalana desarrolla una sombrilla inteligente para el sector de la restauración que almacena la energía solar.

El investigador catalán Gerard Cortina y la empresa IASO han desarrollado una sombrilla inteligente que, además de proteger a las personas de la radiación solar, almacena la radiación solar en forma de energía eléctrica para poder utilizar para iluminación. Este parasol se utilizará en el ámbito de la restauración con el objetivo de aprovechar la energía renovable que proporciona el sol y darle un segundo uso proporcionando una fuente de energía para la iluminación que incorpora el propio parasol.

El proyecto ha recibido el apoyo de ACCIÓ -la agencia para la competitividad de la empresa dependiente del Departamento de Empresa y Conocimiento- a través de la línea de ayudas TECNIOspring, que promueve la incorporación de talento experimentado en las empresas y agentes de I + D catalanes. Con un presupuesto de 10 millones de euros cofinanciados entre ACCIÓ y la Comisión Europea, esta iniciativa, enmarcada en las acciones Marie Sklodowska-Curie del programa Horizon 2020, financia hasta el 100% la contratación de investigadores con el objetivo de promover de I + D empresarial y la transferencia de tecnología en Catalunya. La empresa IASO contrató al investigador catalán el 2018 a través de esta ayuda para desarrollar conjuntamente el proyecto.

Este sombrilla incorpora celdas fotovoltaicas de silicio monocristalino de alta eficiencia, que incorporan otros materiales de apoyo que permiten reducir el peso del panel solar. Estas celdas fotovoltaicas forman varios paneles solares que transforman la radiación en energía eléctrica. Mediante un conjunto de dispositivos electrónicos, se almacena la radiación solar en una batería que suministra la energía suficiente para dar una autonomía de cinco horas en los paneles luminosos. Estos paneles pueden utilizarse tanto para iluminar el área que cubre la sombrilla o bien como reclamo publicitario iluminando el nombre del establecimiento. Al mismo tiempo que de día la sombrilla protege a las personas de la radiación solar, se obtiene energía de origen renovable que se utiliza como iluminación por la noche. IASO y Cortina prevén disponer de un prototipo funcional del producto a principios de 2020.

De acuerdo con Gerard Cortina, que lidera la investigación, "el objetivo del proyecto es combinar un elemento de protección solar y aprovechar la energía de la que nos estamos protegiendo para almacenarla y utilizarla para iluminación durante las horas nocturnas, aprovechando las funcionalidades de dos productos existentes y combinarlas para crear uno solo ". "Muchos sombrillas actualmente ya llevan sistemas de iluminación incorporados que se deben conectar mediante cables a la corriente eléctrica de los locales, pero si conseguimos que sean autónomos y tengan su propio sistema de captación de energía y de iluminación iluminación, se evita la necesidad de utilizar el cableado ", explica Cortina. El investigador apunta también que de esta manera "se sensibiliza a la población sobre el uso de las energías renovables".