Los independentistas deberíamos estar tranquilos, los pactos antinatura los han hecho los unionistas.

Recuerdo cuando se decía que en España no había ultraderecha porque esta votaba al PP.
Incluso El País, cuando hacía mapas sobre los ultras en Europa, dejaba en blanco la península; para el diario del grupo Prisa, si no se manifestaban o presentaban en solitario, no existían.

Hasta tuvieron la desfachatez de decir que la derecha española se había vuelto de centro con la aparición de C's...
Pero llegó VOX... Ya no se podía vender más el relato de que no existe la extrema derecha en España, aunque algunos articulistas todavía le llaman centro-derecha al trifachito.

Bien, la cuestión es que, por complejos de la izquierda (la de Podemos principalmente), la ultraderecha (sí, ultraderecha) se juntan, se revuelcan en el fango y pactan...

Así ha ocurrido en Madrid. 
Posiblemente al único partido que le hará algo de daño en el futuro es a C's, que empezaron siendo socialdemócratas, luego se convirtieron en liberales y ahora son ultranacionalistas...
Realmente, quien se ha quedado con un par de narices es el PSOE que creía que con esa gentuza se podía pactar...

Y lo que ha ocurrido en Barcelona.
Aquí hay mucho que comentar.
Primero de todo está el apoyo de Valls-C's a los "perroflautas". Imaginen ustedes todos esos propietarios de pisos que votaron a Valls porque les prometió que no habría control del alquiler; o que los bares tendrían terrazas tan grandes como quisieran. 
Pues va y pone a la Colau...
Sí, sí, todo un sujeto que quería ser presidente de la República francesa (un país con bomba atómica y con derecho de veto en la ONU) deberá conformarse con estar en la oposición en el ayuntamiento de Barcelona después de apoyar a una antisistema...

De acuerdo que la excusa es "antes Colau que los indepes", pero siempre quedará en la memoria del Círculo Ecuestre que Valls ha hecho alcalde a Colau. Aunque sea con la excusa del mal menor ya no se podrá confiar más en ese político y en C's; partido que regaló sus siglas a un cazafortunas...
Si el PP busca un mejor candidato en el 2023, los votos retornarán.

Luego está la Colau... 
Qué decir de su pacto antinatura... Es muy probable que ella les diga a sus bases que lo importante es retener la alcaldía. Lo compro, pero es como eso del "pulpo como animal de compañía". Cualquier normativa progresista deberá contar con ERC, algo que Maragall ya dijo ayer que no sería nada fácil...
Y para aprobar los presupuestos ya veremos cómo lo hace. Se puede conseguir con una moción de confianza, aunque durante un mandato solo se puede plantear en un par de ocasiones, es decir, que solo aprobará dos presupuestos o lo hará con el apoyo de Valls...

Veremos también como vende eso a su electorado.

Y, como siempre, los que parece que salen ganando en esta jugada es el PSC. Ellos recogerán los descontentos de los Comuns...

Por lo tanto, queridos independentistas, contemplemos como la Colau se reparte el ayuntamiento con los herederos de la gauche divine y con los votos del racista Valls.

Y disfrutemos también de ver como el amante de la ex de Pronovias y dueña de Almirall, traiciona a sus votantes apoyando a la Colau...

Es evidente que 4 años es mucho tiempo, que todavía hay diferencia en la ciudad de Barcelona para conseguir que la alcaldía sea independentista, más aún si se fracasa con la CUP y Graupera.
Ahora sabemos que en la capital de Catalunya hay que ir con una candidatura de izquierdas (ERC+CUP+ Front Republicà+EUiA) y con otra de centro-liberal (Junts+Graupera).

En fin, solo hay que disfrutar del espectáculo, el independentismo solamente representa el 40% de los votos en Barcelona y parece que nuestros enemigos quieren ayudarnos...