sábado, octubre 04, 2014

Editorial de EL PAÍS en contra de Catalunya y de Artur Mas.

No hay nada que se parezca más a un facha de derechas que un facha de izquierdas...
La única diferencia entre la prensa del ABC, El Mundo y La Razón con la del grupo PRISA es que los de Polanco saben que España sin Catalunya desaparecerá, y claro... duele, duele mucho...

Pongo en negrita algunas palabras o frases que creo conveniente resaltar porque mienten, porque insultan, porque hacen juicio de valor o porque menosprecian.

EDITORIAL:

La ajetreada cumbre soberanista de ayer, presidida por el titular de la Generalitat, Artur Mas, aparentó una voluntad común de mantener la convocatoria del referéndum independentista del 9 de noviembre en Cataluña, conculcando la decisión de paralizarla del Tribunal Constitucional (TC), como producto de un supuesto deseo de “unidad” a todo trance.

Pero bajo ese deseo anidan graves fisuras, como hoy informa este periódico. Porque todos los partidos pretenden defender al mismo tiempo sus propios perfiles. Y todos, prisioneros de la presión populista de la calle, quieren evitar ser el primero en desdecirse de una consulta legalmente suspendida —y que saben imposible—, no sea que le carguen el sambenito de traidor a la causa. Actúan así encadenados, mutuamente atrapados entre sí, para mantener un consenso que tiene tanto de ficción como de ficción es su objetivo inmediato, el 9-N.

A ese agarrotamiento multilateral se le superpone otro pulso, vertical: el del president, único competente para convocar elecciones anticipadas. Mas bracea, ansioso por fijar un plan b: encabezar una lista única que enmascare una segura catástrofe en las urnas (anticipada ayer de nuevo por el instituto de encuestas), el sorpasso de Convergència por Esquerra, ya iniciado en las europeas, y su jubilación obligatoria a la vera de su padrino, Jordi Pujol. Sin un acuerdo sobre esa lista única, sin la “unidad” de todos a los que espera someter, convocaría a su antojo. Pero claro, a algunos —como Iniciativa— les incomoda la servidumbre a un caudillismo conservador.

Es ese escenario de fondo, de frágil unitarismo, el que explica los vaivenes de la guerrilla reglamentaria, obstruccionismo judicial o filibusterismo normativo practicado por Artur Mas, y multiplicado en los últimos días para ganar tiempo en (corteses) ultimátums. Se trata de enarbolar heroicos desafíos, a la Constitución y al TC, sin ofrecer flancos formales automática y rotundamente ilegales —solo sujetos a interpretación, ese típico indicio de fraude de ley— para capitalizar a los radicales movilizados y segar el alza de su socio/rival Esquerra.

Por eso se elabora una defectuosa ley de “consultas” y se aparca una semana en el cajón; se elabora a su amparo un decreto de convocatoria en secreto ante sus socios; recurre la suspensión de ambos textos al TC para mantener la apariencia de que aún se mantienen vivos, permitiendo así la agitación y propaganda consiguientes; se amaga entre dudas la designación de los miembros de la comisión de control de la consulta (una suerte de junta electoral), que al final firma, pero ¡sin fijar fecha para su entrada en vigor!

Esta frivolidad normativa no se justifica por ningún inmovilismo del Gobierno central (por otra parte, lamentable cuando alimenta la dinámica de crispación). No se justifica, porque opera en primer lugar contra los propios catalanes. Su efecto inmediato es llevar a engaño a la ciudadanía a cuya “soberanía” se apela, con la falsa finta de que el 9-N se celebrará un pseudoreferéndum legal que sus convocantes saben hundido.

Este engaño político es tanto o más grave que el fraude de ley que asoma a cada paso legal del proceso, y que los tribunales sabrán ponderar en todo su alcance: ni más, ni tampoco menos. Políticamente es desastrosa la inseguridad jurídica a la que se aboca una autoridad que sortea, burla o desobedece normas y sentencias. ¿Con qué legitimidad podría exigir el cumplimiento de la ley a sus administrados? ¿Son conscientes los partidarios de un Estado independiente de que si llegaran a este conculcando la ley validarían toda evasión fiscal, todo desorden público, toda infracción de tráfico, todo delito de desacato contra ese mismo Estado?
(fuente El País)

Ya ven, al final lo borda, si nacemos como Somalilandia seremos Somalilandia...
La deuda de PRISA, y eso que ya se han vendido Mediaset y la mitad de CANAL+.
Que se preocupen cómo la pagarían en una España sin Catalunya.
Si quieren seguir vendiendo libros de texto Santillana en Catalunya que empiecen a lamernos el cu...

Lo dicho, acojonados pero sin ofrecer nada. Ellos pretenden que Artur Mas anule la consulta y todos para casa, a seguir siendo expoliados, a seguir siendo españolizados por leyes en contra de la lengua catalana y a seguir viendo como ni invierten ni cumplen con las infraestructuras.

Señores del GRUPO PRISA, haber sido más honrados con el estatut, haber escrito editoriales contra esa sentencia del TC o contra el incumplimiento de la adicional tercera... Y ahora no estaríamos hablando de esto.

Vosotros también habéis creado independentistas con vuestra sumisión y pleitesía antes los gobiernos de España.

Realmente sólo os interesaba los derechos del fútbol y ahora veréis como España se destruye.

5 comentarios :

Anónimo dijo...

El Grupo Risa ha tenido artículos de muchos asuntos realmente buenos, pero en línea general ha sido tan patético que ya ha perdido toda la credibilidad.

Estos son peores que el ABC y compañía. Al menos los otros van de cara.

ART dijo...

Yo entiendo que un periódico, es bueno o malo, si elimino los artículos políticos, excepto si explica que es una herramienta para un fin político.
A mi me gustaba mucho el Mundo, hasta que lo jodieron, hace 2-3 años, pero ni miraba los artículos de política. El ABC me gusta, incluso mirando los de política, porque son muy divertidos, y me descojono leyéndolos. Muy bueno poniendo artículos de toros, en portada. Descojonante del todo. Es como leer periódicos de la época de Franco. Muy interesante para ver que piensa la España profunda madrileña.
El País es un periódico que ha perdido la cabeza en el tema político de Cataluña. Pero no está mal como periódico en general.

He de decir que siempre hablo de periódicos digitales, gratuitos, o con artículos gratuitos. Si hay que pagar, no lo hago. Sería una ruina, pagar 20 periódicos, a los que le miro 5 artículos al día, de media. Yo leo para aprender del mundo, y lo leo todo, de derechas e izquierdas, independentistas, e unionistas.

Si no me canso, pondré un comentario largo sobre el País, que tengo hecho a medias.

Cántabro dijo...

Santillana vende Alfaguara y sus sellos literarios a Random House RETIENE LA DIVISIÓN EDUCATIVA, INFANTIL Y JUVENIL PARA NO PERDER INFLUENCIA EN LATINOAMÉRICA
http://www.elconfidencial.com/cultura/2013/04/18/santillana-vende-alfaguara-y-sus-sellos-literarios-a-random-house-119110/

Jordi Català dijo...

Sólo le faltaba esto a El País...

http://www.directe.cat/noticia/371605/les-enquestes-del-pais-sota-sospita

ART dijo...

Yo se al 100% de probabilidad, que las encuestas del País como los de el 90% periódicos de España, son mentira. Si el resultado que les dan no les gustan, se los inventan descaradamente. No van a pagar para joderles la marrana. Ellos si saben la verdad, pero no te la van a contar a ti, si no les interesa.