lunes, marzo 11, 2013

Hace 9 años, España estuvo al borde de otro golpe de estado.

Hasta que no lo dijo Almodovar parecía que todo era un rumor...

Pillados por las mentiras, Aznar intentó desconvocar las elecciones democráticas del 14 de marzo del 2004 con la supuesta excusa que la sociedad española estaba en shock... cuando lo que realmente quería era ganar tiempo, tiempo a costa de cadáveres...

Tal como dijo el cineasta, los españoles y catalanes pudieron dar gracias al internet y a los móviles, el famoso pásalo se recordará como el primer movimiento cívico espontáneo que consiguió ganar unas elecciones con la derrota del embuste. El mismo día de los atentados la telefonía fija y móvil registraron incrementos del 725% entre las nueve y las diez de la mañana, quedando las redes colapsadas.
EL PUEBLO SE JUGABA LA VERDAD.

Mucha bilis se escupió posteriormente, el PP nunca asumió su derrota democrática en las urnas y la prensa ultraderechista se encargó de ensuciar el nombre de las víctimas y poner en duda toda la investigación. Curiosamente los mismo medios que intentan destruir la convivencia catalana.

El partido popular quiso engañar a la población con que los terroristas eran los de la ETA, cuando en realidad se demostró que los asesinos eran unos criminales islamistas que, presuntamente, intentaron vengar el hecho de que Aznar le declarara la guerra a un país soberano como IRAK, estado que nunca le había hecho nada a España, al contrario, el antiguo régimen agasajó a Sadam Husein, cuando este visitó a Franco en 1974, otorgándole la Gran Cruz de la Real Orden de Isabel la Católica.




Las falsedades de EL MUNDO, LIBERTAD DIGITAL Y COPE duraron años y años.
Fue la llamada teoría de la conspiración.

Se llegaron a decir auténticas burradas como que las bombas se construyeron con polvos para remediar el olor de pies.
Fue Pedro Jota el que alimentó el odio con el ácido bórico, entre el ridículo y la befa de la profesión, y que salpicó de lleno al inútil de Jiménez Losantos y al resto de los conspiradores. Luego, intentaron acusar, sin pruebas, al Ministerio de Interior por falsificar documentos.
LA CREDIBILIDAD DE LA LEGALIDAD ESTUVO EN PELIGRO,

Pedro Jota, Losantos y sus conpinches del odio, pretendieron hacer creer al pueblo que los atentados se habían perpetrado con supositorios de ácido bórico (y todavía continúan con ello...).

¿Y por qué le dieron importancia a algo que también se utiliza para matar cucarachas?
Pues porque ese polvito blanco también se había encontrado años ha en un piso franco de ETA.

O sea, si  hubieran encontrado RAID en los dos pisos estarían diciendo que las bombas se fabricaron con insecticida...

En fin, fue un terrible día para la memoria de España que unos aprovecharon para vender periódicos, otros para intentar seguir en el poder y otros para darse relevancia.

Finalmente el peso de la justicia cayó encima de los responsables de los atentados, los terroristas fueron condenados a 40.000 años de prisión.
La sentencia dictaminó que los atentados fueron obra de "células o grupos terroristas de tipo yihadista" y que no hubo intervención de ETA en ellos.




Y para terminar, recordar que el pueblo español actuó con firmeza, que la gente corriente de Madrid actuó con total generosidad.
Pero, como siempre, algunos malnacidos, afines a la teoría de la conspiración, se encargaron de enviar como spam las fotografías de los cadáveres. Fotos que sólo pudieron tomar gente "acreditada"...
Para ellos, y sus instigadores, el mayor de los desprecios y que caiga sobre ellos el infortunio.

Por desgracia, los de la teoría de la conspiración y los que utilizaron a los muertos siguen en sus puestos sembrando el odio.
El ácido bórico ahora se llama Catalunya...


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