domingo, septiembre 07, 2014

El tratado de libre comercio entre USA y UE se cargará la sanidad pública entre otras cosas...

Muy pronto todo el mundo hablará del ATCI.
Del tratado de libre comercio entre la UE y USA.

Los periódicos no hablan de ello, los mesetarios y La Vanguardia-El Periódico están por la labor de reventar el proceso hacia la libertad de Catalunya y publicar portadas sobre Pujol...
Todos esos panfletos han encontrado tema tan suculento para esconder las desgracias que ocurren y que ocurrirán en breve.
Aquí un formidable artículo sobre lo que es el ATCI

¿Y que dice la UE?, pues esto:

El TTIP tiene como objetivo eliminar las barreras comerciales entre los Estados Unidos y la Unión Europea (suprimir aranceles, normativa innecesaria, restricciones a la inversión, etc.) y simplificar la compraventa de bienes y servicios entre estos dos espacios. Eliminar esas barreras supondrá crecimiento económico, creación de empleos y una disminución de los precios. El Centre for Economic Policy Research (CEPR)pdfcalcula que la economía europea podría beneficiarse con 119 000 millones de euros al año y la estadounidense con unos 95 000 millones de dólares. 

Ya ven, ya han calculado "nuestros beneficios"... Gracias...

El sistema sanitario representa el 40% del presupuesto de las comunidades autónomas... Y Aznar haciendo lobby para vender la sanidad de las regiones mandadas por el PP...

El sistema sanitario público está en peligro. El riesgo no está en la pretendida insostenibilidad que pregonan los profetas ultraliberales (en la acción pública siempre es sostenible aquello que se quiere sustentar). La auténtica amenaza son las políticas neocom que pretenden apoderarse de los presupuestos dedicados a los servicios públicos.

Los buitres de la especulación financiera planean alrededor. Hay una planificación estretégica, que viene de años atrás, y tiene por objetivo desmontar los servicios públicos y apoderarse de su financiación. No se trata de una nueva teoría de la conspiración sino de hechos y datos contrastados. Podemos afirmar, con toda certeza, que existe un plan internacional, financiado y liderado por la poderosa industria farmacéutica y las grandes empresas de la tecnología sanitaria. Esta estrategia, diseñada a gran escala, es aplicada de forma estricta, por los políticos cómplices y los grupos de presión, a nivel local.

YA LO HEMOS VISTO en Madrid y Valencia, esas comunidades ofrecen a grupos de inversión sus hospitales a tanto la persona. Pero si hay que hacer una operación de cadera lo envían al público que quede (tontos no son...).

Este plan va dirigido a garantizar el acceso de las grandes empresas transnacionales a los presupuestos dedicados a la sanidad (que representan alrededor del 40% del presupuesto total de las CCAA), con el objetivo de conseguir la privatización de los servicios sanitarios, que son vistos por los inversores privados y por la industria farmacéutica y de tecnología sanitaria como una enorme lista de compras.
O SEA, A TANTO LA CARNE HUMANA...

Si se firmase este Tratado, en los terminos que pretenden las partes negociadoras, podrían tornar irreversibles las privatizaciones de los servicios públicos, pues la legislación estatal quedaría condicionada por la normativa de superior rango de la UE...

Es inevitable que nuestra sistema sanitario terminará como el de los EEUU...

Más información aquí también.


ENTREVISTA SOBRE EL TEMA:

RESPONDE EL ECONOMISTA JOSÉ RAMÓN MARIÑO.


¿Por qué se hace un tratado de libre comercio si se supone que las barreras arancelarias entre EEUU y Europa no son elevadas?
Los grupos empresariales de ambos lados del océano llevan años soñando con un acuerdo entre ambos y han defendido de forma sistemática una idea de acuerdo de amplio alcance.  Y efectivamente los aranceles son tan bajos que apenas pueden reducirse ya, pero los funcionarios negociadores de ambos lados reconocen que el verdadero y principal objetivo es eliminar las barreras reglamentarias que limitan los beneficios potenciales de las corporaciones trasnacionales en ambos mercados. Y ellos llaman “barreras” a algunas de nuestras normas sociales y regulaciones ambientales más preciadas, como los derechos laborales, los reglamentos de sustancias químicas tóxicas, la seguridad alimentaria, etc

¿A qué niveles puede llegar a afectar? ¿Lo va a notar el ciudadano de a pie?
El ciudadano lo acabará notando en infinidad de facetas de su vida cotidiana. Por ejemplo, en Europa funciona el principio de cautela, es decir hay que demostrar que una sustancia química es segura antes de usarla, mientras que en EEUU este principio no se aplica. Las normas de seguridad alimentaria en Europa son más estrictas y frenan las importaciones de alimentos transgénicos, alimentos tratados con pesticidas, hormonas, cloro, etc que los EEUU sí permiten. Europa ve con recelo el fracking y EEUU no. No habrá frenos a la privatización de los servicios públicos: agua, sanidad, educación, etc

Los reacios a este convenio afirman que peligra el empleo, ¿en qué se basan para asegurarlo?
La propia Comisión Europea ha admitido que es probable que el tratado provoque perjuicios prolongados y considerables para los trabajadores europeos, pues el incremento comercial con EEUU tendrá un shock inicial en los sectores industriales más afectados que obligará a una reestructuración. Hablamos de productores de carne, fertilizantes, azúcar, metal, madera, papel, etc.  Los ajustes que serán necesarios llevan asociados unos costes que deberán afrontar. Y aunque algunos sectores aumenten la empleabilidad, la transferencia no es automática, se precisará formación y ello implica de nuevo costes y medidas preventivas, que de entrada no se contemplan en el tratado. La experiencia del tratado EEUU, Méjico y Canadá no es nada halagüeña al respecto. Por no citar la posible pérdida de derechos laborales, no debemos olvidar que EEUU no ratifica convenciones de la Organización Internacional del Trabajo relacionadas con libertad sindical, negociación colectiva, etc.

Pero según la Comisión Europea, el acuerdo supondría unos beneficios anuales de 119.000 millones de euros, es decir 545 euros por hogar y nuestro país sería el cuarto beneficiado en creación de empleo y riqueza. 
Estos datos son los de un estudio encargado por la Comisión Europea que suscita muchas dudas sobre su metodología, y sobre el modelo econométrico utilizado por introducir hipótesis poco realistas y no ajustarse a la realidad global económica. Además el trasvase de las ganancias empresariales a las ganancias familiares no se sigue de manera lógica. En España las grandes empresas aumentan sus beneficios, mientras que las rentas familiares menguan.

Entre las consecuencias que pronostican señalan que las grandes empresas se van a situar por encima de los estados. Eso, a ciertos niveles, ya sucede  ¿Se podría agudizar de entrar en vigor el tratado?
Efectivamente las grandes empresas tienen una gran capacidad de lobby y su influencia es evidente. Pero lo que el tratado plantea es una verdadera amenaza a la democracia, pues establece la posibilidad de que las corporaciones transnacionales demanden directamente a los países por pérdidas en sus áreas de competencia, derivadas de decisiones de política pública, es decir se otorga a las corporaciones el poder de cuestionar las decisiones democráticas tomadas por los estados soberanos y de pedir indemnizaciones cuando estas decisiones afecten a sus beneficios.

El ciudadano que vive ajeno a estas negociaciones. ¿Por qué un asunto de esta índole no trasciende cuando, según apuntan, afectará en la vida cotidiana de todos?
Todo el proceso está siendo opaco, por voluntad de los negociadores. Las negociaciones se están haciendo a puerta cerrada, sin una consulta pública efectiva. Los parlamentarios nacionales no son informados sobre los detalles de los textos de negociación de la comisión. Y los pocos fragmentos que han sido publicados o filtrados han generado considerable inquietud.

¿Cuál es el posicionamiento del actual Gobierno de España?
El Gobierno de España está totalmente a favor del tratado, como no podía ser de otra forma conociendo su programa económico, social y medioambiental, que representa claramente los intereses de la economía capitalista neoliberal.
¿Y el resto de la UE?
En general parecen bastante favorables al acuerdo, con muchos matices y dudas concretas según de que país se trate, con contestación social creciente y conocimiento ciudadano cada vez mayor. Iremos viendo a futuro si hay o no cambios de criterio.



En fin, no tendremos la suerte que nos echen de la UE...

7 comentarios :

cusber dijo...

50 preguntas y respuestas sobre el Tratado de Libre Comercio http://www.agarzon.net/50-preguntas-y-respuestas-sobre-el-tratado-de-libre-comercio/

Anónimo dijo...

Sant Andreu.

El aeropuerto del Prat vuelve a superar en agosto al sobredimensionado, costoso y favoreciendo aeropuerto de Barajas según datos de aena.
En concreto 252975 pasajeros más, un 6,3%. De confirmarse un mayor número de pasajeros en julio, según datos de aviación civil, serían 3 meses consecutivos en los que el Prat es el aeropuerto más transitado de la red de aena.

Jordi Català dijo...

Es curioso como aviación civil se retrasa tanto para los datos de julio:

http://www.fomento.gob.es/MFOM/LANG_CASTELLANO/DIRECCIONES_GENERALES/AVIACION_CIVIL/ESTUDIOS_Y_PUBLICACIONES/ESTADISTICAS_DEL_SECTOR/TRANSPORTE_AEREO_EN_CIFRAS/TRAF_MENS_AEROPUESP.htm

Jordi Català dijo...

Gracias por el link Cusber.

Anónimo dijo...

Sant Andreu.

Curioso también que lo publicasen un sábado por la tarde. Viernes debía de estar reunido un gabinete de crisis. Tal vez estudien 100 medidas para putear al Prat.

Anónimo dijo...

El mismo tipo de acuerdo comercial está funcionando entre Canadá, EUA y Méjico.

Para hacerse una idea de que significara este acuerdo entre la UE y el EUA esta un claro ejemplo.

El Parlamento de Quebec aprobó una ley impidiendo el fracking en su territorio.

Una empresa ha denunciado al gobierno de Canadá porque esta ley estaría limitando sus potenciales beneficios.

Es decir, para mantener el agua potable hay que pagar directamente a una empresa privada.

Esto es extrapolable a cualquier sector, cualquier regulación sería susceptible de ser denunciada.

Anónimo dijo...

Creo que en Europa se está tensando esta cuerda demasiado.
Considero esta sociedad incompatible con todos los cambios que se avecinan.
Me da a mí que tras las voladuras controladas del sector público, llegará un movimiento igual de radical pero en sentido inverso. Eso sí, no saldrá de ningún despacho sino de la sociedad.