Finalmente no fue ni italiana ni catalana... |
GTD y Nexter garantizaban carga de trabajo para un millar de trabajadores catalanes, o sea, personas de España. Además se preveía dar pedidos a 40 empresas suministradoras.
La empresa catalana GTD y su socio francés Nexter dieron un contenido industrial español a su oferta para hacerse con el contrato del Gobierno español para fabricar 300 unidades del nuevo vehículo blindado de ocho ruedas (8x8), que sustituiría a los actuales BMR, a los Vamtac y a los Aníbal del Ejército de Tierra. Y lo hicieron porque sabían que ese contenido industrial español era uno de los elementos que más valorará el Ministerio de Defensa a la hora de la adjudicación.
Lo que no sabían es que el ejército lo vería como catalán, no como español...
GTD, tenía previsto constituir una sociedad conjunta con sede en Catalunya que sería la que se encargaría del proyecto, con unas instalaciones de 25.000 metros cuadrados en la Zona Franca y con una mayoría de directivos españoles. Incluso hizo una mapliaciónde capital por valor de 10 millones de euros.
Esa sociedad se haría cargo de la ingeniería del producto, de la de fabricación, de la cadena de suministros, de la integración de sistemas y de la línea de integración final. En total, daría empleo directo a un centenar de personas. Pero la carga de trabajo que podía generar el proyecto en España era de 1.000 personas y que el 100% de los retornos quedarían en el país.
La oferta de GTD y Nexter se basaba en el VBCI que el grupo francés ya fabrica para las Fuerzas Armadas galas. El vehículo cuenta con cerca de 2.000 componentes que, para su producción, se agrupan en unos 150 módulos, suministrados en su mayoría por subcontratistas y suministradores. La idea era trabajar con entre 30 y 40 empresas, no todas españolas, de las que cerca de ocho eran suministradoras de primer nivel (tier 1). Los socios ya negociaban con automovilísticas de Catalunya y con empresas como TAM, Aernnova, EADS, Oto Melara, GMV o Tecnobit.
La empresa conjunta que GTD y Nexter nació con la vocación de liderar el mercado de vehículos blindados de ruedas, no sólo en la versión de ocho ruedas sino también en la de cuatro y en mercados fuera de España.
El VBCI que ofrecían GTD y Nexter a Defensa, del que ya se habían entregado más de cien unidades al Ejército francés, perdió la concesión.
El Piranha V suizo, por medio de la contratista estadounidense General Dynamics, se llevó el contrato en una asociación con Santa Bárbara para fabricarlos en Sevilla y Asturias...
Ya ven de qué sirve estar en la UE si el ejército español contrata a empresas intermediarias de EEUU e ingeniería suiza...
Seguro que alguien dirá que finalmente se ensambla en España..., pero el modelo de GTD llevaba mucha ingeniería catalana (ergo española, ¿no?).
Es la propia España la que echa a Catalunya...
En fin, así fue como la industria automovilística de Catalunya se quedó sin una rama importante como es la fabricación de blindados...
Lógicamente, habrá que tener Estado propio para poder desarrollar esos vehículos de la catalana GTD...
2 comentarios :
GTD y Nexter querian vender el blindado francés a España (VBCI) y me gustaría saber si en su oferta lo traían ya de Francia o almenos se dignaban a ensamblarlo creando una fábrica en España,aunque con ello pierdes las horas de trabajo de la construcción de las piezas que si tendrás con un producto construido 100% en España.
El que se ha elegido es el piranha V que se construirá en España al 100% (sin contar los sistemas que se compren para dotarlo tipo misiles spike,etc)
Su construcción lo hará santa Bárbara Sistemas que es una filial de Generar Dynamics la cual toma la familia piranha creada en Suiza para crear una nueva variante en suelo español.
Además que se utiliza empresas con experiencia que ya han estado presentes en proyectos como el Pizarro o el leopard 2E.
Un último apunte,es sustituto de los BMR y algunos toac,pero los Vamtac siguen en producción y se sacan versiones mejoradas aún.
De los Aníbal mejor ni hablar.
Joder tío, no te has leído el post. El modelo iba a hacerse 100% en la Zona Franca de Barcelona.
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