martes, febrero 06, 2018

The New York Times tiene DOS MILLONES y MEDIO de suscriptores. Algo imposible en la prensa-basura de España.

Recuerdo haber visto un reportaje en el que se trataba el reto digital del diario neoyorquino. Tenían dudas, pero sabían que si ofrecían artículos de calidad, la gente pagaría...

Y actualmente se acerca a los dos millones y medio de suscriptores...



El periódico -de tendencia demócrata- sigue teniendo una plantilla de 1.300 redactores y sus abonos van de los 1,75 dólares a la semana hasta los 4 euros. 
A años luz, calidad-precio, de esos 84 euros anuales que te pide Pedro J Ramírez por El Español (eso sí, te regalan una licuadora...). Dicen que tienen 10.000 suscriptores (leones...).

Pero, oigan, es normal, ¿qué estúpido pagaría por un periódico español...? ¿Para leer a Félix de Azúa, o a Vargas Llosa, o a Arcadi Espada, o a Lluís Bassets, o a Pío Moa, o a Joaquin Coll...?
¡Por dios, deberían pagarme ellos a mí!

En España, cuando un periódico monta un ERE, los despedidos crean un digital, o sea: de un periódico de papel deficitario sale otro en la red también deficitario.
Malviven de los gobiernos de turno.

Okdiario (Inda) compra usuarios falsos para engañar a las empresas que quieren publicitarse en esa cosa...


En España, donde pone "suscripción", cámbienlo por "SUBVENCIÓN"

Es que, incluso, si naciera un periódico digno en la red, España es un país de piratas. Nadie paga por nada...
Por poner un ejemplo de éxito, El Confidencial está en venta y nadie lo compra...



Es más, si los tradicionales (El País, El Mundo) hacen algo de pago, se les cae la audiencia y los ingresos por publicidad...
¿Quién se hace de El País digital?
Nadie, ni Cebrián...
Alguien de ustedes pagaría un céntimo por El País, un periódico que nos tilda de nazis...

Mientras hayan blogs gratis (y no subvencionados como este), que nadie pague ni un céntimo.

1 comentario :

Numi dijo...

Tota la raó. Ahir vaig fer una ullada a varis diaris digitals i alguns eren pures escombraries, escampant coses sense ni proves. Embruta que va fort !

Premsa que abans era seriosa ara es pamfletària i alguns van encara més lluny, en la practica difamen.