La Costa Dorada se queja del boicot español...

Los hoteleros siempre quejándose...
Aunque sea cierto que España, a diferencia de Catalunya, se toma muy en serio el boicot, hay que recordar que los "Salous" se han caracterizado por el turismo basura y por culpa de ello han hecho huir al tradicional.

En todo caso, nunca he escuchado a alguien del gremio de los hoteles que esté contento con la temporada, siempre se lamentan de algo...
Que pongan el fin de semana a 50 euros todo incluido y mañana mismo hago una reserva...

Según parece, este verano será de los más flojos de los últimos años, con una previsión de ocupación de los hoteles de la costa tarraconense por debajo del 80%, cuando habitualmente en julio y agosto está alrededor del 90%. Aparte del descenso de los turistas rusos, la Costa Dorada vive mucho del turista español y, desde 2012, el descenso ha sido progresivo hasta un 30% de turistas españoles, respecto a los extranjeros. El gremio de hoteleros de la demarcación empieza a decir abiertamente que el proceso soberanista de Catalunya es el que frena la afluencia de turistas del Estado en sus establecimientos.

Hasta ahora este factor, controvertido y muy difícil de demostrar, era un argumento que el sector pronunciaba con la boca pequeña. Pero las escasas cifras de reservas de turistas del resto del Estado en la Costa Dorada para los meses de julio y agosto de este año, que crecen tímidamente pero de manera muy inferior a otros destinos de sol y playa españolas, han hecho que los hoteleros levanten el tono.

Y claro, yo seguiré siendo español para que ellso se forren...

Puestos a buscar cifras que avalen esta tesis, llama la atención que a partir del verano de 2012, año de la eclosión del proceso soberanista, el turismo del Estado pierde protagonismo en la Costa Dorada de una manera muy brusca . Si damos un vistazo a los porcentajes de turismo español y extranjero al destino de los últimos 10 años se observa que hasta el 2011 oscila entre el 40% y el 50% el turismo español respecto al extranjero. El equilibrio está considerado como óptimo para el sector, como en el caso del mes de agosto de 2011, cuando los turistas españoles representaron un 49% en la Costa Dorada. Este equilibrio, sin embargo, se rompe a partir de 2012. Desde entonces, el porcentaje de turistas españoles en la Costa Dorada los meses de julio y agosto cae en picado y se estabiliza alrededor del 30%, llegando en algunos momentos a un pírrico 25%.

Hasta ahora, los rigores de la crisis económica en el Estado, que dejaban muy poca renta disponible en los bolsillos de las familias españolas para hacer vacaciones, eran el argumento para explicar la gran descenso de los últimos años de turistas provenientes de territorios como el Aragón, La Rioja y Navarra, mercados tradicionales de la Costa Dorada. Pero este año el turismo español que apuesta por el sol y playa se recupera con fuerza a otros destinos del Estado.

La falta de reacción del turismo del Estado en la Costa Dorada es especialmente sangrante en las puertas de una temporada alta con muy malas perspectivas. Los hoteleros prevén un descenso de un 15% en el empleo para este mes de julio, unos malos augurios que si se cumplen harían que la ocupación bajara del 80%, cuando en los últimos 10 años en temporada alta este índice siempre ha sido alrededor del 90%. Unos mínimos históricos que preocupan al sector, que buscará con ofertas agresivas captar el mercado de última hora...

Más allá de las dudas que genera el estancamiento del turismo del Estado y sus causas, el factor que más incide en los malos presagios para la temporada alta en la Costa Dorada es el derrumbe del turismo ruso. Se espera que este año caiga en un 60%, un descenso que se acumularía a la del 20% registrada en 2014. La caída en picado del turismo ruso comenzó justo después de que en 2013 se alcanzara un máximo histórico, con 468.000 rusos desfilando por la Costa Dorada, lo que la convertía en el primer destino del Estado. Desde entonces, la coyuntura geopolítica internacional, la devaluación del rublo y la ralentización de la economía rusa han jugado en contra de la Costa Dorada. Para tratar de compensarlo, los hoteleros y el Patronato de Turismo de la Diputación de Tarragona confían en el crecimiento de otros mercados como el inglés, el francés, el de los Países Bajos o de otros...

Estaba claro que los que organizan Saloufest quieran ser españoles...