Se escucha el himno español, incluso algún utillero arranca la bandera catalana de las manos del deportista y quien paga es Catalunya (paga Pujol como se decía...).
No hay parangón en el mundo pero, para que esto pase, no sólo es necesario un estado ladrón y expoliador, además, hace falta la connivencia de una nación, la catalana, con unos mandatarios pésimos. Pronto hará un año que la sociedad catalana clamó la independencia y en el Parlament los políticos cobrando sueldos...
LA NOTICIA:
El portavoz de la Generalitat y a la vez consejero de Presidencia, Francesc Homs, acusó esta mañana al Gobierno español de deslealtad institucional en materia de deporte y afirmó que el Estado debe al Ejecutivo catalán 5,4 millones de euros que le correspondería pagar para el Centro de Alto Rendimiento (CAR) de Sant Cugat. Para este año, la cifra a pagar debería ser de 2,5 millones, pero hace varios ejercicios que Madrid no envía el dinero, por lo que el Gobierno autonómico lo tiene que cubrir “en la medida de nuestras posibilidades”. En este centro reside la élite del deporte español.
La acusación de Homs se produjo en el marco de una pregunta parlamentaria de ERC, que se queja de que los otros tres CAR que existen en España, dos en Sierra Nevada y otro en Madrid, sí que son subvencionados al 100% por el Gobierno de Mariano Rajoy. “La situación económica nos ha llevado a unos recortes del 50% en los últimos años. Desde Esquerra no queremos que se aplique un criterio lineal a la hora de repartir recursos, porque, aunque el CAR de Sant Cugat sea la joya de la corona, sus instalaciones deportivas sirven especialmente a las federaciones deportivas españolas, mientras que algunas catalanas, como la de softball, no tienen acceso. Lo que queremos es que se ayude más a las federaciones catalanas por el servicio social que prestan y, especialmente, las que compiten internacionalmente bajo la senyera catalana”.
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