Los catalanes pagamos la cuarta parte del Tribunal de Cuentas (unos 17 millones), una cosa nepotista llena de políticos de Madrid (sobre todo del PP) enchufados y militares.
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| Nadie fiscaliza el Tribunal de Cuentas. |
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| En Madrid saben ponerse los sueldos... |
Aquí el presupuesto entero con una partida de 4 millones por productividad (JUAS JUAS JUAS JUAS).
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| Al antiguo presidente no pueden dejarlo colgado con una mierda de pensión... |
En 2014, el diario El País desveló en una investigación que los lazos de parentesco del Tribunal de Cuentas alcanzaban a cien empleados de un plantilla de 700 personas, y que los dos últimos presidentes del comité de empresa acumularon 17 allegados. Aproximadamente el 14% de la plantilla tenía vínculos familiares dentro de la institución; y cerca del 10%, vinculaciones con altos y medios cargos.
El anterior presidente, Ramón Álvarez de Miranda, según explicó El País, incorporó en la plantilla «a su concuñada Cristina Querarto Iborra, y a un sobrino, José Manuel García Soriano». Esta endogamia se debe, fundamentalmente, a que las oposiciones se realizan internamente, sin que en los tribunales haya expertos de fuera.
El Tribunal de Cuentas paga a sus empleados un 30% más de media que otros organismos públicos en un convenio hecho a su medida.
Y eso que sus trabajadores no son ni especialistas de los argos que ocupan: solo 5 de los 60 informáticos del Tribunal Cuentas son especialistas...
Imaginen ustedes una empresa que necesita un informático.
-Qué sabe usted de informática.
-Me bajo películas porno.
-Contratado.
Y usted pensará: ¿por qué tienen a 5 que sí saben del tema?
Pues porque hacen el trabajo de los otros 55 que son enchufados...
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| ¿MS-DOS...? ¡Ostras!, yo hice un curso a principios de los 90... Ya puedo trabajar en el Tribunal de Cuentas... |
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