lunes, octubre 26, 2015

¿Por qué en Catalunya han votado 735.000 personas a Ciudadanos?

Fabulosa reflexión que Francesc Abad escribió en su blog Dies de gloria y que después de unos días he decidido traducir al español (las negritas son mías).

El «misterio silencioso» de los votantes de Ciudadanos o porque hemos fracasado tanto con 735.000.

Una de las muchas cosas que han pasado este 27S ha sido el extraordinario incremento de voto de Ciudadanos, que los 275.000 votos que obtuvo en 2012 han pasado a la tremenda cifra de 735.000 votantes. Es un dato sobre la que tendremos que reflexionar, y mucho, para saber qué hay detrás de un fenómeno de esta naturaleza y del impacto y consecuencias que puede tener no sólo en nuestro panorama político, sino también en nuestra sociedad.

Estos días he pensado bastante, intentando entender este hecho, un hecho que de entrada me resulta altamente incomprensible, se escapa de mis coordenadas racionales de análisis. Y es que tal vez el fenómeno ciudadanos tiene muy poco racional y muy de otras cosas. Pero esto podría ser un apriorismo mi desacertado y que me impidiera observar el fenómeno de una manera más global, más integral.

¿Qué es lo que sabemos de Ciudadanos y de sus votantes?

Ciudadanos surge como una apuesta de laboratorio para movilizar y radicalizar el voto unionista. Hasta su surgimiento el voto unionista no había tenido una actitud centrada exclusivamente en el españolismo, en el españolismo radical y desacomplejado como única propuesta. La gran fuerza política españolista era el PP, pero tenía también un fuerte componente ideológico, a partir de propuestas políticas que vertebraban el espacio conservador. El PP era y es un partido españolista, pero era y es también un partido conservador, de orden y de gobierno. Además el PP había estado en algunos consensos iniciales criminalizados después por Ciudadanos, como la inmersión lingüística, que finalmente el PP también ha terminado combatiente. El PP, además, como partido de gobierno, había participado de pactos con CiU (en Madrid y Catalunya) y con el PSC (en los grandes «temas de estado" que ellos llaman).

El objetivo de Ciudadanos, desde su nacimiento, es articular, captar, movilizar un segmento de votante muy determinado, muy concreto: el de los ciudadanos de Catalunya nacidos fuera de Catalunya y el de sus descendientes.

Digo que es una propuesta de laboratorio porque es la primera que se atreve a explotar sin contemplaciones una realidad de la sociedad catalana: el origen de sus ciudadanos. Todos sabemos que las grandes olas migratorias hacia Catalunya del siglo XX provinieron de España: de Andalucía, de Extremadura, de Galicia, de las Castillas, de Murcia... Según algunos datos que circulan, el 70% de la población de Catalunya o ha nacido fuera, o ha nacido fuera alguno de sus padres o ha nacido fuera alguno de sus 4 abuelos.

La sociedad catalana ha tenido históricamente -o eso pensávamos- una gran capacidad de integración. El hecho de que la catalanidad, el considerarse catalán, se vinculara históricamente a la voluntad de serlo es el ejemplo más claro, como lo es aquello tan célebre de «es catalán quien vive y trabaja en Catalunya».

Y aunque el lerrouxismo ha sido siempre la herramienta que ha utilizado el estado para intentar dinamitar este proceso de integración y sus consecuencias (la asunción de una realidad social y política con unas demandas y planteamientos propios), lo cierto es que siempre ha sido más fuerte el trabajo de la mayoría de fuerzas políticas, sindicatos y sociedad civil para hacer realidad aquello de «un solo pueblo». En este sentido no me cansaré nunca de reivindicar el enorme trabajo del PSUC, que llevó de la mano la cuestión social y nacional y que dio un marco de integración a muchísima gente, como mi padre, murciano y psuquero.

La transición y la recuperación del autogobierno en Catalunya fueron acompañadas de unos consensos muy grandes y muy importantes, en los que inicialmente también estaba el mundo actualmente pepero, entonces UCD y Alianza Popular. El impulso de la normalización lingüística y de la inmersión lingüística en la escuela son dos hitos de ese momento.

A pesar del consenso político lo cierto es que rápidamente los sectores más ferozmente españolistas y anticatalanes se movilizaron, superando los mismos partidos que podían recoger su voto.

Y su gran objetivo siempre ha sido y lo sigue siendo la inmersión lingüística. En aquellos primeros años del autogobierno recuperado se produjo la virulenta reacción que se concretó en el Manifiesto de los 2.300, contra la inmersión lingüística y en general la normalización lingüística. Todos los partidos y todos los sindicatos de la enseñanza hay reaccionaron con una gran unidad. Yo recuerdo que mi padre, que participó en el proceso de fundación de la USTEC, el sindicato de maestros mayoritario, de un fuerte componente izquierdistas y catalanista, fue, con muchos otros compañeros de otros sindicatos como Comisiones, en el Palau Blaugrana, donde hacían una asamblea-akelarre los de este manifiesto para incendiar la comunidad educativa, para hacerles frente. Lo recuerdo como si fuera hoy. Y estamos hablando de principios de los 80...

Socialmente se detuvo y no tuvo ninguna repercusión. Y, sin apoyo social, la batalla la trasladaron -y aún sigue- en el ámbito judicial.

Durante los años 90 se reanudó «la guerra de la lengua», por utilizar la expresión tan precisa de Eduard Voltas que dio nombre a un magnífico e indispensable libro para saber todo lo que pasó entonces y sus actores. Una vez más la escuela y la inmersión lingüística en el centro de esta guerra.

La victoria sin mayoría absoluta del PP de Aznar a nivel español y los pactos del Majestic con CiU para garantizar la gobernabilidad en España desactivó esta guerra, fue una de las condiciones de CiU. De rebote esto implicó que el PP tuvo que apartarse quien era uno de los máximos líderes de aquella guerra de la lengua, Alejo Vidal Quadras. Y este relevo terminó de enloquecer a este siniestro personaje.

En un contexto en el que CiU había pactado con el PP en Madrid y el PP había terminado hoz los últimos gobiernos Pujol, cuando perdió la mayoría absoluta, surge Ciudadanos.

Ciudadanos se presentó ante la sociedad con un único objetivo y propuesta política: convertir en un hecho político el origen de las personas, movilizar las personas y su voto simplemente por su origen. Ciudadanos convierte así en una atroz propuesta política de carácter únicamente identitario, que podríamos decir también etnicista: el origen debe determinar el sentido del voto. Y debe hacerlo no con ninguna voluntad inclusiva socialmente, sino divisiva.

Si el origen de la mayoría de catalanes está en España, hay que movilizar este origen, transformarlo en voto, y así imponer un proyecto político inequívocamente colonialista, que combatiera, hasta su liquidación, cualquier rastro o manifestación de la catalanidad. Hasta ese momento las expresiones de la catalanidad, el hecho de la catalanidad había combatido siempre «por lo militar».

En un contexto de elecciones democráticas, si los ciudadanos votan en función de su origen, es posible articular mayorías desde las que imponer un proyecto radicalmente españolista que liquide cualquier manifestación o expresión de la catalanidad, de la lengua, de la cultura, del sentimiento, y acabar así no sólo con el hecho diferencial, sino con la atávica «cuestión catalana», expresión política con que se define la respuesta a un ininterrumpido y salvaje agravio y saqueo en la sociedad catalana.

En esta estrategia, desde siempre, liquidar la inmersión lingüística ha sido el gran objetivo. Una escuela que forme y trate por igual a todos los niños, que garantice sus competencias lingüísticas en catalán y en castellano, y que lo haga sin distinción de origen era y es la gran amenaza para el proyecto identitario y etnicista del unionismo que se condensa en Ciudadanos. La división en función del origen debe darse desde la primera aula, porque eso es lo que acabará conformando dos sociedades, la de los «catalanes», guetizados, y la del resto, que llevados por su origen crecerían como sociedad paralela, y que como estadísticamente se sabe somos mayoría los nacidos fuera o con origen fuera de nuestros progenitores, pues así se haría realidad su proyecto político.

Después de una presencia política poco más que testimonial, en 2012, en un momento en el que el proceso ya avanzaba con intensidad, saltaron del grupo mixto a estos 275.000 votos que recibieron.

Y ahora, este 2015, el 27S, en unas elecciones de carácter plebiscitario, es cuando su proyecto identitario y etnicista de vehicular un voto a partir del origen ha alcanzado su gran éxito, con estos 735.000 soportes.

Aunque el crecimiento de Ciudadanos ha ido radicalizando el PP en Catalunya, lo cierto es que el PP nunca ha dejado de hacer propuestas políticas alineadas con su ideología conservadora. Igualmente, el PSC-PSOE, que es el otro voto refugio del unionismo, no sólo presenta propuestas ideológicas alineadas con la socialdemocracia europea, sino que también, a diferencia de PP y, no hace falta decirlo, de Ciudadanos, mantiene su compromiso con los elementos centrales que configuran los consensos para ser o seguir siendo «un solo pueblo».

Una primera respuesta, por tanto, al crecimiento de Ciudadanos la encontramos directamente alineada al mismo crecimiento del proyecto independentista, y este 27S y su carácter plebiscitario es la máxima tensión independentista que nunca ha tenido Catalunya. Ante esta tensión evidente, la reacción de una parte de la sociedad no ha sido hacerlo apoyando otras propuestas políticas con otras propuestas para las diferentes problemáticas sociales que tenemos en Catalunya, sino convertir su origen en el motor de su voto, que es la propuesta que les estaba haciendo hace tantos años Ciudadanos.

¿Tú o tus padres no habeis nacido fuera de Catalunya? Pues a ti lo que te toca es votar contra los catalanistas, votar contra la independencia, porque esto es una cosa de los de aquí, y tú no lo eres, tú eres ESPAÑOL

Hace unos años el inefable de Jordi Cañas bramaba en un mitin en Cornellà cómo le voy a decir a mi padre -o a su abuelo, no lo recuerdo- que no está enterrado en España !!!! Cómo le voy a decir que ahora está enterrado en un país extranjero !!! Nunca! Esto es España !!!! »

Fínjese el abismo que va de aquel PSUC que trabajaba incansablemente para mejorar las condiciones de vida de todos los trabajadores, en las fábricas, en los barrios, en las escuelas, y que lo hacía siempre sin distinguir origen, haciendo realidad el «un solo pueblo» a este discurso de Ciudadanos, en el que no importa nada de lo que pasa en la sociedad, lo único que importa es que somos españoles y por encima de todas las cosas tenemos que seguir siendo españoles, y no por voluntad, sino porque estás encadenado a un origen.

¿Cómo puedo yo ser tan miserable de pensar en un futuro mejor para mis hijos si mi padre murciano está enterrado en Corbera d'Ebre y ahora, cuando lo vaya a visitar al cementerio, a llevarle flores, le tendré que decir, padre, lo siento, no he podido impedir que no estés enterrado en España, ahora a eso le llaman Catalunya?

Bueno, mi padre, el pobre, si me sintiera decir algo así, le escucharía revolverse en el nicho, sentiría su bofetada y le sentiría gritarme ¿esto es lo que yo te he enseñado? ¿Esto es el ejemplo que te dí? ¿Esto es lo que entiendes por luchar por una vida mejor para todos? ¿Esto es lo que es para ti proteger a los más débiles?

No, Cañas no hablaba de un futuro mejor para sus hijos ni para ninguno de los que la escuchaba. Cañas hablaba de que todo lo que hacía políticamente era por el origen de su padre, o de su abuelo. Es esto lo que estaba transmitiendo a la gente. Olvídese de su vida, olvídese de todas las chorradas de un futuro mejor para todos vosotros y para vuestros hijos. Su misión en esta vida y en este lugar donde estás es garantizar su españolidad. Y eso está por encima de cualquier otra consideración.

Y por ello, este 27S, ha habido 735.000 personas que lo han comprado, que lo han avalado. Ciudadanos no tiene otra propuesta, ni económica, ni social, ni en nada de nada, que un «yo soy español»

¿Oiga, ha oído hablar de los 16 mil millones de euros fruto del trabajo de todos los catalanes que confisca el estado español y que no retornan a Catalunya ni a su gente? Para un votante de Ciutadans sirve cualquiera de estas respuestas:   
- No lo he oído   
- Lo he oído y no me lo creo   
- Lo he oído, lo sé y me da lo mismo porque «yo soy español» 

¿Oiga, usted coge cada día los trenes de cercanías, verdad? Sí. ¿Sabe cuál es la inversión que hace el estado en Catalunya y cuál en Madrid? ¿Sabe que por eso cada día tiene incidencias, llega tarde o no puede ni entrar en los trenes?
-No lo sé
-Lo sé y no me lo creo
-Lo sé y me da lo mismo porque «yo soy español»

Y así hasta el infinito. Porque infinitas son prácticamente las motivaciones racionales que tenemos para querer la independencia, que Ciudadanos ha conseguido que no tengan ningún valor porque, para sus votantes, lo importante es «yo soy español».

Dos anécdotas de esta campaña en el barrio de San Ildefonso, donde me crié, donde fueron a vivir mis padres procedentes de Lora del Río, cuando yo tenía 4 años. Estábamos repartiendo folletos de información «7 Razones para la independencia»

Un chico, muy educadamente, sacudió en aspa las dos manos para que no le diera diciéndome «lo siento, yo soy español». Ok. Fin de la cita.

Una señora mayor le doy, la coge, sigue caminando y a los pocas pasos se gira, viene hacia mí y me dice «¿y por qué ahora no nos quereis? Llevo más de 50 años aquí y ahora me decis que no me quereis?» Señora, intenté replicar, pero no fue posible, se fue, ella y los más de 50 años que decía que llevaba aquí, pensando que le estábamos proponiendo algo que ofendía su origen, aquel lugar de donde hace más de 50 años salió para tener un futuro mejor y llegó a Cornellà. Para ella pesaba más aquel lugar de donde hacía más de 50 años había marchado que cualquier otra consideración en relación al lugar y la gente donde hacía más de 50 años vivía.

Me quedé triste. No pude explicarle nada. La mujer se fue «ahora no nos quereis», con un plural que incluía, para ella, toda la gente que no había nacido en Catalunya, por el simple hecho de pedir la independencia. No necesitaba atender a ningún argumento, en ningún motivo, a ninguna explicación.

Es evidente que para que el mensaje de enervación identitaria y etnicista de Ciudadanos haya triunfado ha sido necesario una presencia en medios de comunicación que no hemos podido contrarrestar de ninguna manera. Con mucha habilidad el establishment ha promovido e impulsado las voces de Ciudadanos, y lo ha hecho a través de los medios que llegan más directamente a su público de referencia, y que nosotros no hemos tenido NINGUNA posibilidad de contrarrestar.

La gente que ha votado Ciudadanos no ha ido a sus mítines, que han llenado con autocares venidos de toda España. Ni se manifiestan. Ni participan en la vida social o asociativa de sus barrios, fábricas, escuelas o universidades. No les hace falta. Nada de todo esto les preocupa.

Ciudadanos está consiguiendo algo contra lo que siempre todos habíamos trabajado, fracturar la sociedad en función de su origen. No importa nada de lo que te pase a ti ni de lo que pase a tu alrededor. Lo único que importa es que o tú o tus padres no han nacido en Catalunya. De manera que haz honor a tu origen y votános, vota Ciudadanos. Y no preguntes. Y no pienses en nada más que en «yo soy español». Porque de aquí, en el cielo, con la tranquilidad de saber que cuando te mueras estarás enterrado en España.

Y así hasta 735.000 personas. 735.000 motivos de intranquilidad y de fracaso en explicar que todo por lo que trabajamos es con la conciencia de ser «un solo pueblo» y que la independencia beneficia a todos, absolutamente a todos, con independencia de nuestro origen o el de nuestros padres .


5 comentarios :

NAEUER dijo...


Casi totalmente de acuerdo con el articulo pero hay un factor que no se ha mencionado.

Es el efecto Colau.

La Colau arrastro muchos votos en las municipales, pero no abrio la boca en las Catalanas

Ademas de un trasvase del PSC y PP , tambien hubieron muchos que votaron a la Colau que se pasaron a Ciudadanos.

Si la Colau aparece en campaña con su mensaje arreglalotodo culpando a todo el mundo de los males, y prometiendo la Arcadia y casas gratis para todos, Ciudadanos bajara. Y bastante.

La reafirmacion españolista ya se ha hecho y ahora toca la situacion economica personal la que importa. Y por eso , si la Colau aparece en campaña, profetizo una bajada notable de los Riberas.

Veremos ( y esperemos )

Josep dijo...

Ademas Albert Ribera va tener que cambiarse el nombre si quiere triunfar en la meseta.

ART dijo...

BASF asegura que el proceso no afecta a las inversiones de la compañía en Cataluña

Lo ha confirmado el vicepresidente de BASF, Erwin Rauhe, que en febrero de 2014 firmó un polémico documento de empresarios extranjeras contrarios a la independencia

http://www.directe.cat/noticia/444212/basf-assegura-que-el-proces-no-afecta-les-inversions-de-la-companyia-a-catalunya

Juan dijo...

Te felicito Jordi por tu reflexión. El pasaje de la señora que llegó a Cornellá es muy revelador.

Lo inquietante es que los unionistas tirarán de esa argumentación trasnochada hasta la saciedad. Es un buen producto de marketing aunque sea falso como un billete de 15 euros.

Jordi Català dijo...

Gracias, pero la reflexión no es mía, tal como pone arriba de todo es de Francesc Abad.