El hockey sobre patines tendrá Superliga Europea organizada por los clubes y el fútbol todavía no...

El hockey sobre patines sigue los pasos del baloncesto en que los clubes crearán su propia competición europea.

Quien siga ese deporte habrá observado que este año los grandes del hockey no disputaron la Copa de Europa como protesta que la competición les cuesta dinero incluso ganándola.

De ahí que este año se haya proclamado vencedor de la liga europea organizada por la CERH un desconocido club italiano (Trissino).

Tal cual, los grandes clubes se plantaron y decidieron no participar en la temporada 2021-22. Es por eso que hicieron una prueba de su potencial en el torneo del 50º aniversario del Liceo Coruña. Allí fueron los "rebeldes" Barça, Reus, Caldes, Noia y Liceo de la OK Liga; los portugueses Sporting, Benfica (ganador), Porto, Barcelos y Oliveirense; el francés Saint Omer, y el italiano Forte. .

Es decir, los clubes escindidos suman 51 títulos de 55...

Por cierto, fue un error que los únicos que siguen con la Superliga Europea de fútbol no hicieran un triangular para poner nerviosa a la UEFA...

Vivimos en un época en que los nuevos forofos siguen a los deportistas en Instagram, en Tik Tok... Por ejemplo, en Japón son más fans de Messi que del Barça, y si el jugador se marcha al PSG, el fanático nipón se compra la camiseta del equipo francés. Pues eso ya está ocurriendo en Europa.

Entra dentro de la lógica el aburrimiento de los aficionados en los deportes con antiguos y repetitivos sistemas de competición, sobre todo en los jóvenes que prefieren los e-sports.

No tiene ningún sentido que un club como el Barça tenga 22 Copas de Europa de Hockey como tampoco empieza a tenerlo que el Madrid tenga 14 de fútbol. El daño que hace eso a la audiencia es terrible (caen en picado). Todo campeonato interregional debería pasar por una liga de todos contra todos para que sea más competitiva. El sistema por sorteo empieza a ser algo arcaico y poco justo. 

En fin, los clubes empiezan a estar hartos de que las federaciones internacionales tengan dirigentes con sueldos estratosféricos que no se preocupan por la verdadera rentabilidad del deporte que rigen. Bien hacen los clubes de organizar sus propias competiciones internacionales.