La empresa aborda nuevos mercados internacionales, que espera que representen el 60 por ciento en tres años.
La
empresa de embutidos de Olot (Girona) Espuña ha ido adaptándose a lo
largo de sus 65 años de historia a las nuevas necesidades y cambios de
la sociedad. La compañía familiar, que empezó su actividad produciendo
grandes piezas de embutido para vender a las charcuterías, modificó su
estrategia en los años 80 para adaptarse a los nuevos hábitos de consumo
después de la explosión de los hipermercados. A partir de esta fecha,
la empresa apostó por los productos envasados en pequeñas porciones para
adaptarse a la gran distribución.
En estos momentos marcados por la quiebra del mercado español, Espuña opta por potenciar la internacionalización, estrategia que inició hace más de 10 años. Las ventas al exterior ya representan el 45% de la facturación de la empresa, que el 2012 se situó en 72,4 millones de euros. Ante la caída del 12 por ciento de las ventas en España (posible boicot) y un aumento del 19 por ciento de la facturación en los mercados internacionales, Espuña está abordando nuevos mercados.
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| ESPUÑA DA TRABAJO A ESPAÑOLES... |
Producto estrella
La
empresa de embutidos, que exporta a 30 países espera iniciar su actividad este año
en México, Ecuador y Australia, mientras que Canadá y Estados Unidos son
su siguiente reto para el 2014.
Tal y como afirma el director de
márqueting de Espuña, Josep Maria Riera, la previsión es que los
mercados exteriores lleguen a suponer el 60 por ciento del negocio en un
período de tres años. Además de potenciar la internacionalización, este
año la empresa invertirá 1,5 millones de euros para desarrollar nuevas
gamas de producto y ampliar la producción de "cañitas", un snack para
picar que fabrica en una de sus plantas de Olot.
La empresa cuenta con
cuatro plantos de producción -dos en Olot (Girona), una a Utrillas
(Teruel) y una en Argentina-, da trabajo a 427 trabajadores y cuenta con
más de 500 referencias de productos. El jamón curado loncheado es el
producto estrella de la compañía y representa el 68 por ciento de la
facturación, seguido de las tapas de embutido, que suponen el 11 por
ciento del negocio. El principal mercado exportador es Franci, que en
2012 aportó 17 millonse de euros.
YA VEN COMO SON LAS COSAS, SI HUBIERA UN GRAN BOICOT LO PRIMERO QUE POSIBLEMENTE CERRARÍA ESPUÑA ES SU PLANTA DE TERUEL...
hace un par de años que espuña ha cerrado varias lineas de produccion en olot para abrirlas en teruel.
ResponderEliminartambien ha bajado los sueldos a sus trabajadores con la excusa de la crisis.
no quiero decir que no sea verdad lo que dices pero que espuña sean catalanistas.... mas bien creo que acabaran cambiando el nombre por un mas catalan en cataluña y dejando en teruel la fabrica como está para seguir vendiendo en españa.
No digo que sea catalanista. Es una noticia económica sobre la realidad que algunas empresas catalanas exportan más que no venden en España.
ResponderEliminarSobre su futuro, todo son suposiciones, pero repito, no sé de qué le serviría tener una planta en Teruel si hubiera boicot a productos catalanes. Salvo que decidiera cerrar completamente todas las plantas catalanas. por lo que el boicot sería catalán...
Una muestra que lo de los boicots son muy difíciles de hacer y de "contentar" a todo el mundo...
LO DE BAJAR LOS SUELDOS... es el pan nuestro de cada día, todo está organizado para que al final todo el mundo termine cobrando 700€ al mes...