La nueva financiación será PEOR para Catalunya: perderá 3 puntos de IVA y no contará el del turismo.

Ya lo dije otras veces, si se cambia el sistema de financiación, para Catalunya será peor. Dicho y hecho...
Nos quitarán 3 puntos de IVA y, atención, no se tendrá en cuenta lo que recauda ese impuesto en Catalunya solo en turismo...
Por lo tanto, solo en IVA, el expolio será de algo más de 10.000 millones de euros...


Medio año de reuniones y, al final, ningún cambio sustancial. La propuesta que el comité de expertos presentará la próxima semana sobre la reforma de la financiación autonómica no prevé grandes cambios respecto al actual marco, y mejora poco (o nada) las condiciones de aquellas comunidades que se habían quejado más. Así lo explican varias fuentes conocedoras de las reuniones que se han producido. Si las recomendaciones que recoge el informe se llevan a la práctica sin cambios, no se condonará la deuda que las autonomías han contraído con el Estado, no se tendrá en cuenta el coste de la vida de cada comunidad para repartir el dinero y, sobre todo, tampoco se distribuirán estrictamente en función de lo que aporta cada autonomía. Se mantiene, pues, el statu quo.

Ordinalidad, pero no a la práctica.
¿Qué recoge finalmente el informe? Una de las reclamaciones históricas de Catalunya es que el sistema de financiación se rija por el principio de ordinalidad, es decir, que las comunidades reciban según el mismo orden que aportan y no pase como ahora, que Catalunya es la tercera que más aporta, pero la décima que más recibe. El informe hace un intento de incluir la ordinalidad, pero acaba matizándolo. Según explican las mismas fuentes, la propuesta de modelo pasa por nivelar los recursos de todas las comunidades y dar más dinero a las que tienen más capacidad tributaria. Así, serían las comunidades más ricas las que más recibirían. Pero la propuesta incluye una cláusula de statu quo que prevé compensar las comunidades que de entrada perderían recursos respecto a la actual situación. Así pues, no habría cambios sustanciales.

Otra manera de neutralizar la ordinalidad es la propuesta que el comité de expertos prevé respecto al IVA. Se dejaría de repartir en función de la capacidad recaudatoria de cada comunidad y a partir de ahora se haría en función de la población ajustada. Esto significa que se contabilizará a partir de la población residente y, por tanto, las comunidades con más turismo no recibirán dinero en función de lo que realmente han recaudado. Este cambio es uno de los que han subsanado las Islas Baleares, que han recogido una propuesta alternativa con decenas de mejoras al documento de los expertos.

Eso quiere decir que Catalunya, que representa el 25% del turismo no percibirá nada por eso. Todo los males del turismo deberán ser sufragados por la Generalitat, no recibirá ninguna compensación por ello.
Además, si Catalunya recibía hasta ahora el 19% del IVA que reparte el gobierno (una cantidad proporcional al PIB pero no a la recaudación del impuesto en Catalunya que es del 24,5%), a partir de ahora recibirá el 16%.

Vuelvo a repetir, ese 16% es de la mitad que reparte el gobierno español, ya que la otra mitad se la queda entera para ella, por lo tanto, Catalunya representará que solo puede contar con el 8% del total cuando recauda el 24,5%. Eso representa una tercera parte...
A grosso modo quiere decir que de los 16.000 millones que recauda Catalunya solo se quedarán en territorio catalán poco más de 5.000 millones...
Iceta, Colau, Arrimadas y compañía, felices supongo...


Además, se prevé crear un IVA colegiado, que permitiría que las comunidades subieran este impuesto pero solo si se ponen de acuerdo por unanimidad, algo difícil porque algunas ya han avanzado que no quieren hacerlo. Además, también prevé fijar un mínimo y un máximo en el impuesto de sucesiones

El documento tampoco aborda que se repartan el dinero teniendo en cuenta el nivel de vida de cada comunidad, simplemente lo menciona como algo a tener en cuenta más adelante.

Reestructuración de la deuda
Otro de los temas más controvertidos es la posibilidad de condonar la deuda que las comunidades han contraído con el Estado a través de mecanismos como el fondo de liquidez autonómico (FLA). En este caso, el comité no prevé la posibilidad de establecer una quita, sino que se deja la puerta abierta a mejorar las condiciones a través de una reducción o de una reestructuración de la deuda.

Finalmente, ahora que había sobre la mesa la discusión del papel de las comunidades forales, el documento dejará claro el malestar del resto de comunidades con la negociación paralela para actualizar la cuota vasca. Una última muestra que cada uno ha optado por barrer para casa antes de que ofrecer cambios.