España está encabronada.

Espero reír el último cuando le metamos una patada en el culo a España. Dejar de respirar el mismo aire que estos nazis, perdón, franquistas, cuyo modus vivendis es posible gracias al robo que sufrimos los catalanes.
¿De qué va a existir, en la España sin Catañunya -y quebrada-, un Libertad Digital o La Razón...

Ya no es a ver quién la dice más gorda, estamos en otra dimensión, lo que viene de Madrid es tan repugnante que tendremos que desinfectarnos cuando nos larguemos.

No solo eso, yo soy de los que piensa que habrá que expulsar a mucha gente.
De ninguna de las maneras olvidaremos las ofensas y quiénes las perpetraron.

Bien seguro que en España hay buena gente y noble pero tanto los políticos como los medios de comunicación son repugnantes. Espero que, el día que nos marchemos, esa población no la tome con nosotros y pregunte a toda esa gentuza el porqué nos trataron tan mal.

Como insultar a los catalanes es gratificado en Madrid, se pueden permitir el lujo de continuar siendo chulos....

Y aquí este artículo del sonado de Pablo Planas que, según parece, en un principio se titulaba De Perpiñán al Islam y que después ha cambiado por De Perpiñán a las mezquitas.

Ellos sabrán lo que hacen -o no- por mofarse del islam como Charlie...

En fin, tenemos motivos y mayoría suficiente para declarar mañana mismo la independencia.
Nuestros políticos deberían hacer algo muy pronto, se está desencadenado un odio brutal, hay que tomar medidas antes que nos masacren como a los armenios.

O MARXEM O ENS ANIQUILEN...