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lunes, noviembre 25, 2013

España sube el tono.

Ya lo sabíamos, de ninguna de las maneras intentarán evitar el proceso de libertad con el diálogo, más bien al contrario, con el ordeno y mando.

Empezaron con amenazas y mentiras de analfabetos funcionales, luego intentaron destruir la reputación de nuestros representantes con documentos inventados, más tarde lo han probado dejando de invertir en Catalunya y no devolviendo el dinero (adicional tercera) que nos deben...
No contento con ello, han creado leyes express en contra de la libertad en Catalunya y para destruir nuestro pasado histórico y cultural. Incluso han intentado aniquilar el deporte catalán y sus ídolos...

Y ha visto que no nos amedrentamos...

Por eso, en pocos días vemos como Rajoy hace declaraciones del tipo que no aceptará ninguna consulta.
Aznar nos quiere enviar a la cárcel.
El ejecutivo español hace leyes para castigar a los que no piensan como ellos.
La prensa y la tertulias mesetarias esparcen mentiras y odio contra Catalunya día sí y día también.

Hemos visto como, en el parlamento catalán, el PP-PSC-C's violenta sus discursos, señoras que hace años que se les retiró la regla nos envían a tomar por el saco. Diputados de C's y PP hablan en castellano soez. El Pere Navarro culpando a Catalunya de los presupuestos cuando permite el expolio de 20.000.000.000 de euros al año.

El Periódico de Catalunya y La vanguardia Española, han convertido la política catalana en residual, el tema de los presupuestos aparece en la página 20 en el periódico del grupo Z y, como en Madrid, sin recordar el expolio.



Ellos han cambiado de marcha, mientras en Catalunya la casta política sigue en ralentí. El pueblo catalán votó mayoritariamente a los que llevaban en sus programa el derecho a decidir, es un mandato que deben cumplir sí o sí.
Si ahora se acojonan lo que hay que hacer es volver a convocar elecciones y si no es así hay que tener los arrestos para ofrecernos la pregunta, fecha y hora...

¡Aunque los encarcelen por ello!

La ciudadanía catalana confió en su palabra y tienen que cumplirla, luego, los catalanes, ante la reacción que venga de Madrid, sabremos actuar y si finalmente nos quedamos en casa será porque somos unos cobardes y merecemos ser expoliados, nosotros, nuestros hijos y los descendentes de estos hasta la eternidad.

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