Por tres veces hubiera sonado el himno catalán hoy en Jerez...
No existirían los europeos y el mundial de fútbol sin la Masia...
Nunca se hubiera ganado el mundial de baloncesto sin los Gasol, Navarro y otros catalanes.
Los triunfos en waterpolo, hockey sobre hierba y patines, tanto masculino como femenino, se deben a los deportistas catalanes...
Las medallas olímpicas las ganan catalanes o deportistas del CAR de Sant Cugat sufragado por la Generalitat de Catalunya.
Los catalanes recuerdan a lo plavis...
No hay parangón en el mundo que una nación tan pequeña haya dado tan buenos deportistas y atletas.
Y todo eso sin poder tener selecciones, teniendo que regalar el dinero de las fichas a las federaciones españolas de turno y con presupuestos mermados por el expolio de 20.000.000.000 de euros al año.
Inimaginable lo que podrá hacerse con la independencia.
Recordar que, entre otros factores, lo que marca la idiosincrasia de un país es su cultura deportiva y sus éxitos. Catalunya está y estará en lo más alto. Nunca una nación sin estado había tenido tantos triunfos.
Lo malo es que, por la lentitud de los mandatarios catalanes, desde Madrid mañana publicaran tres victorias españolas en Jerez.
Y Catalunya sin un gobierno "con un par"...
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