El estado español nacionaliza inmigrantes para reventar el referéndum catalán...

Estaba cantado, si hay más población será más difícil llegar a los términos de Montenegro:

1. Debe votar al menos el 50% de las personas con derecho a voto.
2. El voto «Sí» debe tener una votación superior al 55% de los votos válidamente emitidos.

Evidentemente también está el miedo a perder la nacionalidad española, el gobierno del PP chantajeará a los inmigrantes en el sentido que la perderán si gana el SI...
Esto sólo es el principio, muy pronto veremos a españoles parados yendo a vivir a Catalunya...

La maquinaria del estado funcionando y los políticos catalanes un tanto adormecidos...

Quizás, ya que la consulta siempre será ilegal, a ojos de España, no pasaría nada si sólo pudieran votar los residentes en Catalunya con, al menos, un año de antigüedad...

El gobierno español los envía para Catalunya después de nacionalizarlos...
Cuidado, podría salirles el tiro por la culata...

Extracto de la entrevista de vilaweb a Angel Colom


-¿El caso de Noureddine Ziani le causa una sensación de indefensión?
-Sí, esa sensación de indefensión, en Noureddine, la tiene. Tanto él como su familia. Y también la tenemos la gente que trabajamos en el encaje de las migraciones que han venido esta última década en Catalunyaa. Debemos tomar el caso de Noureddine como un aviso del aparato del estado español al millón y medio de inmigrantes que viven en Catalunya, muchos de los cuales ya tienen la ciudadanía española. Con este aviso les quieren dar miedo, y han elegido uno de los dirigentes de la primera de las comunidades de inmigrantes, la marroquí, con unos 270.000 ciudadanos. Que este caso sirva de escarmiento a toda Catalunya. Esto va en serio.
...
La otra razón es que intentan asustar a la comunidad marroquí y, de rebote, a todas las demás. Porque todos serán electores en las próximas contiendas electorales.

-El estado español sabe que la inmigración puede ser decisiva.
-Y tanto. Mirad, no olvido nunca que en los momentos previos al último referéndum de Quebec el estado federal de Canadá jugó muy sucio contra el proceso soberanista. Y una de las claves de la derrota por poco más de medio punto fue el juego sucio con la inmigración. Legalizó de golpe muchos inmigrados, les dio muchas prebendas y se sabe que una buena parte de esta inmigración votó no.

-¿Cree que España tratará de hacer algo parecido?
-Creo que tratan de hacer algo así. El caso del Noureddine responde a esta lógica. Por un lado, asustan y, por otra, tenemos constancia de que aceleran la concesión de nacionalidades porque deben pensar que eventualmente podrán movilizar esta población. Posiblemente serán entre 600.000 electores y 700.000, contando los que tienen la ciudadanía española ahora, los que la tienen solicitada y los que la tendrán.

-¿Tiene constancia de que aceleran el proceso de nacionalización de inmigrantes?
-Tenemos la sorpresa de la información que llega desde el Ministerio de Justicia y las declaraciones de Gallardón, que dijo que entre finales del año pasado y todo el 2013 acelerarían la concesión de la ciudadanía española porque han informatizado el sistema y pueden ir más deprisa. Quizás soy mal pensado, pero que de repente, cuando empieza el proceso soberanista en Cataluña, salga Gallardón diciendo esto, cuando no es casual. Dice que durante el 2013 en España se concederán 450.000 nacionalidades más, de las que contamos que unas 200.000 serán a Catalunya. No siento que aceleren este proceso para gente que tiene derecho. Pero que esto ocurra ahora me hace pensar mal. Seguro que intentarán movilizar la inmigración por el no. Por ello el catalanismo ha de trabajar, y afortunadamente ya hace tiempo que se dedica, para informar a la inmigración reciente sobre el proceso.
...
-¿Considere que no tenemos suficientemente en cuenta la inmigración en el proceso?
-Espero y deseo que Cataluña se dé cuenta a tiempo de que la participación de la inmigración es un factor clave, porque si hay consulta habrá cientos de miles de inmigrantes que podrán votar. Hablamos de un cuerpo electoral de origen inmigrante reciente entre 500.000 y 700.000, entre los cuales hay que tienen la ciudadanía o la residencia permanente, y que estos eventualmente también podrían ser electores. Si no hacemos nada para informarles, España les podría movilizar, y pueden ser determinantes en un sentido negativo del resultado. En cambio, deben ser determinantes para la victoria del sí, y por eso los hacemos esta invitación para que sean fundadores del nuevo estado.