Ya lo dice la canción:
La acusación pide prisión eludible bajo fianza para Blesa por riesgo de fuga
Miguel Blesa podría acabar en prisión. El expresidente de Caja Madrid está citado hoy en el juzgado de instrucción número 9 de Madrid como imputado por la concesión de un crédito de 26,6 millones de euros a Gerardo Díaz Ferrán, en el que figuraba como "garantía un holding empresarial que se encontraba en quiebra" y que ya estaba además hipotecado.
La causa se abrió por una querella presentada por el sindicato de funcionarios Manos Limpias, que pedirá hoy al juez que dicte, como medida cautelar, prisión eludible bajo fianza "ante el riesgo de fuga". Lógicamente, es una medida que se solicitará en el caso de Díaz Ferrán, porque el expresidente de la CEOE y antiguo dueño de Viajes Marsans está ya detenido.
En el último auto judicial, dictado el pasado mes de noviembre, se señala ya que tanto Blesa como Díaz Ferrán podrían ser indiciariamente autores de varios delitos societarios. En su querella, Manos Limpias les atribuía ya los de administración desleal, apropiación indebida, estafa, falsedad en documento mercantil e imprudencia grave en el control de la sociedad.
Caja Madrid abrió un expediente a Díaz Ferrán a finales de 2009 por el impago del crédito -abandonó la caja en enero de 2010- y le dio un ultimátum para que lo abonara o aportara nuevas garantías, algo que hizo tres meses después, con Rodrigo Rato ya en la presidencia de la entidad.
Entre ellas, había varios locales comerciales y la transformación de la concesión del servicio de transporte urbano de Alcalá de Henares en una sociedad, cuyas acciones quedaron a partir de entonces pignoradas a favor de la entidad. Díaz Ferrán y su socio Gonzalo Pascual, ya fallecido, ofrecieron también sus garantías personales y las de sus respectivas mujeres. El detonante de que se iniciara el proceso de ejecución fue que la caja descubrió que las acciones de Marsans que el empresario había puesto como garantía ya estaban pignoradas a favor de Banesto, una maniobra que la cúpula de Caja Madrid consideró "inaceptable".
Fue en ese momento cuando el entonces presidente de la CEOE puso como garantía un holding inmobiliario empresarial valorado en 6 millones que, supuestamente, estaba en quiebra. Lo que denuncia Manos Limpias es que Blesa era consciente de todo esto y aún así no dudó en prestar el dinero al empresario.
Más préstamos
En total, entre los años 2004 y 2009 Díaz Ferrán recibió préstamos por un importe de 34,5 millones, lo que equivale al 88 por ciento de lo que se concedió a los miembros del consejo de Caja Madrid.
Entre otros, figuran créditos a familiares por 7,9 millones, tres de ellos hipotecarios, según aparece en los informes de gobierno corporativo de la entidad, para las casas de sus hijos.
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