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martes, octubre 02, 2012

"Parece resultar muy cara la carne de gallina"

90 AÑOS DEPUÉS, EL ESTADO ESPAÑOL, UTILIZA ESTOS CADÁVERES PARA ENARDECER LOS ÁNIMOS.




"Parece resultar muy cara la carne de gallina" es el comentario que dijo Alfonso XIII ante la liberación de los soldados a cambio de un rescate de 4 millones de pesetas de la época.





Está claro que el desastre de la Annual fue el colofón a las aspiraciones de un país eternamente "mediocrizado" por sus dirigentes.


Recordar que la gran mayoría de los soldados eran reclutas sin experiencia ni motivación de luchar en África, evidentemente no iba al ejército quien podía pagar una cantidad de dinero. Como siempre, un ejemplo más de la España rancia, corrupta y decadente.

EN FIN, CON ESTREPITOSO RIDÍCULO, 90 AÑOS DESPUÉS, SE CELEBRA QUE UNA DICTADURA ESPAÑOLA MANDARA A RECLUTAS DE BAJO ESTATUS SOCIAL A LA MUERTE CUANDO NO, DEGOLLADOS.

Consecuencias del desastre

Tras los desastres de Annual y Monte Arruit, el prestigioso general Picasso recibió el encargo de investigar el descalabro militar y depurar responsabilidades. Sin embargo, no debía implicar a ningún miembro del alto mando como responsable de lo acontecido. Los máximos responsables: Alfonso XIII, la cúpula militar y política españolas fueron obviados en la prensa censurada, y la responsabilidad finalmente cayó sobre los altos mandos muertos en campaña. Tampoco pagaron por su responsabilidad los empresarios españoles implicados en la venta de armas a los rifeños, y ninguno de los sucesivos sistemas políticos puso interés en esclarecer el asunto.
Sin embargo, el pueblo sabía, y una nueva hornada de mandos militares también sabía. Mientras la monarquía sufría el mayor desprestigio en siglos, se forjaban leyendas como la carga de caballería suicida comandada por el hermano pequeño de un Primo de Rivera que, a la postre, facilitaría a su hermano Miguel el golpe de Estado de 1923, tras el cuál disolvió el Gobierno y el Parlamento e implantó un régimen dictatorial dirigido por un Directorio Militar.
Geoffrey Regan escribe sobre el Desastre de El Rif: “Las cifras de bajas oscilan según la fuente, pero incluso las Cortes admitieron más de 13.000 muertos, aunque la cifra más probable sea la de 19.000, ya que los rifeños no hacian prisioneros. Las pérdidas en material incluyen 20.000 fusiles, 400 ametralladoras y 129 cañones; todas las inversiones españolas en el norte de Marruecos —ferrocarriles, minas, equipamiento agrícola, escuelas, puestos militares, etc— se perdieron en cuestión de días.


ENTREVISTA CUALIFICADA:

"El desastre de Annual fomentó una idea de venganza"

María Rosa de Madariaga es historiadora y autora de los libros Los moros que trajo Franco y En el Barranco del Lobo: las guerras de Marruecos.


¿Por qué una potencia que había perdido todas sus colonias decide embarcarse en una nueva aventura colonial en Marruecos?
Se debió a la rivalidad existente entre las potencias europeas por la posesión de las colonias africanas a principios del siglo pasado. Gran Bretaña y Alemania no veían con buenos ojos las ambiciones expansionistas francesas, que tenía la intención de crear en Marruecos un protectorado, y que finalmente logró crear en 1912 con el consentimiento del propio Majzen (gobierno del sultán marroquí). Esto motivó que España, en aras de sus "derechos históricos", entrara finalmente en el Rif, obligada en parte por los tratados creados para paliar la hegemonía francesa. Fue una situación difícil y una política de hechos consumados.
También está la cuestión de las minas y la necesidad de mantener tranquilo al Ejército.
Era más que nada una cuestión de prestigio. Las minas de hierro no tuvieron una influencia real, fue mayor el gasto que el beneficio. Por un lado, había un Ejército muy castigado, que se había marchado con las orejas gachas de las antiguas colonias, y que ahora tenía un nuevo campo de acción para nuevos ascensos y honores.
Pero la sociedad civil española se opuso a la guerra.
Hubo gran oposición. Las condiciones del servicio militar (de tres años) eran terribles. Una situación que afectaba especialmente a las clases más populares. Había problemas de hacinamiento, de enfermedades como el cólera. La guerra provocó manifestaciones, que fueron reprimidas por las autoridades. Muchos se preguntaban cómo un país en el que todavía existían grandes zonas subdesarrolladas como en las Hurdes podía permitirse gastar tanto en una guerra inútil.
¿El Desastre de Annual (1921) fue determinante?
Sí. Annual fue un desastre en todas sus dimensiones. Un desastre bélico producido por el pánico, la desbandada por parte de las tropas españolas ante las rifeñas. Murieron unos 10.000 soldados, según mis cálculos. Y se creó gran estupor. Nadie esperaba esta derrota. Y, en realidad, parece ser que no hubo un ataque en regla por parte de los rifeños, fue más el pánico y la confusión de los españoles lo que llevó a este desastre.
¿Es lo que propició el uso de armas químicas?
En parte sí. Pero ya estaba la idea antes. Sin embargo, el desastre creó gran sentimiento de venganza, una voluntad de guerra sin cuartel. El uso de armas químicas se entendía en aquel entonces como un arma moderna. Un modo rápido de acabar con un conflicto.
Cómo ocurriría con la bomba atómica años más tarde.
Exacto. Era la manera de aniquilar al enemigo rápidamente. El revanchismo llevó a la idea del rifeño como un animal nocivo, al que se tenía que aplicar un plaguicida. Para los rifeños aquello fue su Guernica, sólo que con gases tóxicos.
¿El uso de agentes químicos era entendido como algo normal por estas potencias?
No. Se utilizaban en un discreto silencio, como los británicos en Irak o la frontera noroccidental de la India, o los italianos en Etiopía. Lo horrible fue la falta de consideración ante los pueblos que llamaban no civilizados.
Y el líder rifeño Abdelkrim se convirtió en un mito revolucionario.
El movimiento de Abdelkrim representó un salto cualitativo, gigantesco, en la resistencia de estos pueblos. Fue un precursor de la lucha por la autodeterminación, y tras Annual cobró gran notoriedad internacional. El propio Ho Chi Minh (Presidente de Vietnam del Norte) lo citó alabándolo, especialmente por el sistema de refugios y pasadizos subterráneos que había creado en el Rif. Y el Che Guevara fue a visitarlo a su exilio en El Cairo. Su voluntad era levantar el nivel social, cultural y económico de su pueblo negociando con los europeos, a los que admiraba, pero sin renunciar por ello a la independencia.
¿Fue tanta su fuerza simbólica que logró que Francia entrara finalmente en la guerra?
Francia vio que el movimiento rifeño representaba un peligro para todo el norte de África, no sólo en Marruecos. Tras el desembarco de Alhucemas, Abdelkrim resistió hasta 1926. La guerra terminó oficialmente en el 27, en Bab Taza, y pocos días antes aún hubo bombardeos químicos.
¿La guerra de Marruecos fue la escuela de los golpistas de la guerra civil?
Sí. Allí ganó preponderancia ese sector del ejército africano militarista. Sanjurjo, Franco, Millán Astray, fueron los que presionaron al general Primo de Rivera a llevar la guerra hasta sus últimas consecuencias. Y después trasladaron los métodos crueles de la guerra colonial a la guerra civil. Era la guerra de exterminio, no ya contra el rifeño, sino contra el rojo.


VUELVE EL PATRIOTISMO FATUO...

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